El 11 de octubre llega a nuestras pantallas Matrimonio Compulsivo, una comedia romántica, con todos los ingredientes humorísticos de los hermanos Bobby y Peter Farrelly (Algo pasa con Mary, Dos tontos muy tontos), que combina estrafalarias payasadas con gags visuales de lo más retorcido hasta crear una estrambótica comedia de errores.
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Ben Stiller interpreta a Eddie Cantrow, un soltero empedernido que siempre ha resistido a las presiones Doc (Jerry Stiller) y su mejor amigo Mac (Rob Corddry), empieza a preguntarse si no será demasiado selectivo. Conoce a la guapa rubia llamada Lila (Malin Akerman), tienen un romance y, en un arrebato, le pide que se case con él. Horas después de celebrar la boda, mientras los recién casados empiezan a conocerse mejor en el viaje en coche por la costa californiana, Eddie se da cuenta de que ha cometido un error fatal. Al poco de llegar al exótico escondite en México donde pasarán la luna de miel, Lila ha pasado de ser una dulce y tierna compañera a una tía vulgar, que bebe tequila como si fuera agua, con un sórdido pasado. En un bar de copas Eddie conoce a la realista Miranda (Michelle Monaghan), una relajada profesora de gimnasia en un instituto. Se enamora perdidamente de ella, que no tiene ni idea de que Eddie está de luna de miel. Ahora sólo le queda encontrar la forma de liberarse de su esposa sin perder la mujer de sus sueños.
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