Tras la muerte de sus dos hijos en un accidente, el matrimonio entre el autor de libros infantiles Ted y su esposa Marion empieza a ir mal. Ni tan siquiera el nacimiento de su hija Ruth consigue que Marion supere el dolor. El matrimonio vive separado pero guardando las apariencias. Ted tiene numerosas aventuras. Un verano contrata como asistente personal a un joven que se parece mucho a uno de sus hijos muertos. Marion simpatiza mucho con el joven, quien se enamora de ella e inician un tórrido romance.
Crítica
Puntuación del crítico: 9
Sublime en todos los sentidos. Una de las mejores películas que dió el cine independiente del año pasado. El debutante Tod Williams adapta una famosa novela de John Irving con precisión e inteligencia. Un guión excelente con personajes muy ricos, que guardan secretos y actúan de una forma que no podemos entender bien hasta el final. En las interpretaciones deslumbran como dos soles Jeff Bridges y Kim Basinger, ambos soberbios y merecedores de cualquier premio. Especialmente Bridges, un genio de actor, que logra otra brillante composición de personaje y escenas realmente magistrales (como en la que cuenta la historia de la puerta en el suelo o la forma en que murieron sus hijos). Buenos secundarios (Elle "¿hermana de Dakota?" Fanning, Jon Foster, Mimi Rogers...) Película sobria, no exenta de sentido del humor y con un final magnífico. Espléndida fotografía y música de Marcelo Zarvos. Muy buena.
Davis
Ficha de Película enviada por DAVIS el 14 de Marzo de 2005
