Harry Lockhart es en esencia un tipo decente. Es cierto que es un ladrón de poca monta que va por la vida con una mezcla no muy sólida de encanto desfasado y optimismo inconsciente, pero quiere hacer lo correcto. La eterna mala suerte de Harry empieza a mejorar cuando él y su socio están haciendo algunas "compras" navideñas fuera de horas en una tienda de juguetes de Nueva York y la alarma de seguridad acaba con la fiesta. En su frenética huída de la policía, Harry se ve metido sin querer en una audición para una película de detectives de Hollywood y, en un abrir y cerrar de ojos, el productor lo lleva en avión a Los Angeles para hacerle una prueba. Lanzado al feroz mundo de los profesionales, estafadores, perdedores y aspirantes a actores de Los Ángeles, a Harry le adjudican el duro detective privado Perry van Shrike, también conocido como "Gay Perry", para que le prepare para su prueba.
Crítica
Puntuación del crítico: 8
Una de las pelis más divertidas y originales que he visto en mucho tiempo. Tiene ecos de Tarantino y Guy Ritchie o sin irnos demasiado lejos los anteriores guiones de Shane Black ("Arma letal", "El último Boy Scout") ya tenían ese humor negro y mala leche que vemos en esta película.
Lo mejor es que no se toma en serio a sí misma. Ya desde el principio el narrador se nos presenta como un vacilón que cuenta la historia como le viene en gana e incluso se pone a hablar directamente a los espectadores. Como digo es divertidísima, funciona como parodia de este tipo de cine y los personajes principales son la hostia.
Un Robert Downey Jr. impagable, gracioso, espontáneo (en muchas escenas parece que el cabrón está improvisando) y Val Kilmer hace un papel genial, volviendo a demostrar lo infravalorado que está como actor. Se sale.
Destaco algunos puntazos de risa que tiene la peli: la escena en la que Downey Jr. juega a la ruleta rusa con un matón, cuando suena el móvil de Val Kilmer, el portazo que le da Michelle Monaghan a Downey, etc... y el final es cojonudo.
Davis
Ficha de Película enviada por DAVIS el 15 de Junio de 2007
Divertida, quizás al final se lía demasiado con la trama criminal olvidándose un poco del humor, pero es que es difícil mantener durante hora y media el ritmo desenfrenado que tiene por momentos. Robert Downey Jr, perfecto en el papel, y hasta Val Kilmer me gustó (su personaje, más bien).
Me recordó un poco a la primera mitad de El caso Slevin, que a su vez recordaba a Con la muerte en los talones (aunque son estas dos últimas las que se parecen realmente).