Sabbat con Humanidad



      La mayoría de los sabbat se mantienen en la Senda de la Humanidad. No son buena gente, pero permanecen unidos en algunos aspectos a la perspectiva humana. Las nociones del Sabbat de libertad y rechazar la humanidad no implican la práctica de una Senda de Iluminación. La mayoría de los miembros del Sabbat encuentran virtudes a cosas que son pecado desde el punto de vista de la humanidad. Es su perspectiva y no cambia el resultado a nivel de reglas. No importa lo bien que se sienta un vampiro que siga la Humanidad con sus actos maestros de asesinato en masa, pronto caerá hasta Humanidad 3 y sufrirá los consiguientes problemas para resistir el Frenesí, despertar pronto etc.

       Casi Cayendo

       Hay un hecho fundamental en la pertenencia al Sabbat reteniendo la Humanidad. Los Sabbat no son del todo dueños de sí mismos. Ningún vampiro puede permitirse elegir plenamente su conducta, gracias a la bestia y los fundamentos de la supervivencia vampírica. El Sabbat empeora las cosas con sus prácticas y creencias, que empujan constantemente a los participantes a actos que erosionan su conciencia (y su Conciencia).

       Cuando juegas con un vampiro del Sabbat, emprendes una serie de desafíos distintos a los habituales. No es necesariamente más “adulto” o “sofisticado” que otra clase de vampiro, ni tampoco es más “juvenil” o “indulgente”. El Sabbat existe dentro de unos límites más estrechos que la mayoría de vampiros independientes o de la Camarilla. No todo lo que a ti te gustaría que tu personaje hiciese, o no todo lo que a tu personaje le gustaría hacer, está realmente a tu alcance.

       En sus primeros años en el Sabbat, tu personaje puede compensar en parte la pérdida de Conciencia centrándose en fortalecer su Autocontrol. No es sólo una cuestión de reglas. Los Sabbat a menudo se vuelven calculadores, probando sus propios límites a través de Juegos de Instinto y desafíos informales para establecer las circunstancias bajo las que estallan. Una cosa es perder el control en la excitación de una caza, y otra muy distinta el sumirse bajo una furia asesina ante una provocación trivial.

       Cayendo

       Desafortunadamente, el Autocontrol también falla cuando la Humanidad cae. Tras algunos años de rituales, cruzadas y existencia rutinaria en el Sabbat, un vampiro experimentado debe tomar una decisión entre tres posibilidades.:

       •Aceptar un Autocontrol bajo. Esto es lo que eligen la mayoría de Sabbat por muchos años de supervivencia que lleven a sus espaldas. En la mayoría de las ciudades Sabbat, los sabbat cuidan unos de los otros hasta cierto punto, evitando que otros miembros... excepto cuando sacrificar al vampiro indulgente suponga un avance de planes para otros. En estas ocasiones se trazan planes elaborados, con pistas visibles como el creciente rechazo a participar en la Vaulderie con la víctima escogida. Las crisis actuales hacen fácil excusarse en estar demasiado ocupado o cualquier otra cosa, es más difícil traicionar a tus propios vecinos en tiempos de paz. Ambiciones individuales aparte, el Sabbat da muchas oportunidades de hacer algo útil a los vampiros cuyo Autocontrol caiga en picado, desde cruzadas a la provocación de actos de terror al azar.

       •Aceptar restricciones a la autoindulgencia. Ésta es la elección de los vampiros que buscan libertad para interactuar con la sociedad mortal. Deben equilibrar cuidadosamente sus necesidades individuales con el cumplimiento de los ritos, y las situaciones en las que los Vinculum pueden afectarles. Un vampiro con la Humanidad alta (para los estándares del Sabbat) nunca debería esperar tener un puesto alto en la secta ni poder resistir los ataques continuados de otros Sabbat.

       •Abandonar la Humanidad. Es difícil, y nunca ocurre a la ligera.

       Las Sendas no son fáciles ni divertidas de seguir. Requieren que el vampiro muestre más poder de decisión que simplemente tratar de mantener la voluntad propia en situaciones de Humanidad baja. El vampiro adopta un sistema artificial de creencias deliberadamente para contener a la Bestia. Alguna senda en particular puede permitir algún tipo de decisión en niveles bajos, pero la supervivencia a largo plazo requiere niveles de Senda moderados o altos. Las Sendas carecen del margen de error que proporciona la Humanidad. Un vampiro que siga una senda sufre unas restricciones cada vez mayores y se ve sujeto a un código de conducta cada vez más formal. Los observadores que conozcan los dogmas de una Senda saben mucho de cómo un vampiro que la siga debe actuar. En una sociedad tan brutalmente competitiva como el Sabbat, esto puede suponer un gran riesgo.

       Sin embargo, los vampiros siguen acogiéndose a las Sendas, simplemente porque la Humanidad, la longevidad y el Sabbat no son compatibles entre sí. Interpretar el cambio en global puede ser un gancho para los jugadores interesados en profundizar en la psicología de los monstruos. Puede que no sea muy divertido para el vampiro, pero puede serlo para el jugador.

       Consulta la Edición Revisada de Vampiro: La Mascarada pag. 288 para las reglas de adoptar una Senda. Recuerda que esto no sólo son números para una hoja de personaje. Un vampiro que no cometa rutinariamente actos planificados de violencia extrema no está preparado para adoptar una Senda. La puntuación máxima de Humanidad que puede tener un vampiro para adoptar una Senda es de 3, y las oportunidades de éxito son escasas. Da vida a las escenas, una criatura que esencialmente no tiene conciencia y cae constantemente en Frenesí, intenta adoptar diligentemente un código ético cuidadosamente construido. Si lo quieres ver así, hay un toque de comedia en el drama.

       Un vampiro que haya caído hasta Humanidad 1 se enfrenta a una última oportunidad de saltar a una Senda. Por descontado, una criatura tan degenerada no puede contar con sobrevivir durante mucho tiempo. Si no da el salto será destruido muy pronto.

Autor: Tzimize - mousejouse-tzimize@yahoo.es