Relatos Dreamers

Mi nombre es Trícon, y fui un superhéroe; se que puede sonar ridículo vieniendo de un tio en mallas al que pronto daran captura a aquellos que antes llamaba aliados.
Sobre mí, se escribian grandes proezas, como aquella vez que salvé a todo un orfanato de un incendio; se hacian comics de todas clases y series de animación, peliculas que ganaron varios galardones...Por aquel entonces, yo era un superhéroe. Dicen que la primera vez nunca se olvida, la mía fue mas bien por la necesidad de enseñar al mundo lo que era capaz de hacer, mi gran ego me lo dictó así, recuerdo que desmantele una organización que vendía armamento al enemigo, aquello ocupo las primeras planas de todos los periódicos, noticiarios y demas medios....ese primer echo, el traicionar unas ideas, el fallar a tus semejantes, me marcó para siempre.

Estando un día en mi fortaleza, si esa que dicen que todos los supertipos tenemos una, a la cual llamaba Exprión, cumplia el 99º año de mi primera apración y no habia envejecido un ápecie, si algun dia sobrevivo al de hoy lo contare, recuerdo que pensé en cómo, qué ocurriria si me cambiara de bando...puesto que era el tipo mas poderoso del mundo, que nada nni nadie me podia parar, lo hice. Masacre ciudades, me alié con lo peor de cada estado, me hice con sus riquezas y otras cosa más; entonces recibí mi respuesta, al principio, el publico y los medios decían que si lo hacia Trícon era por necesidad, pero al poco em empezaron a tachar de miles de delitos que habia cometido, me di cuenta de cómo los que antes llevaban todas los productos comercializados ocn mi cara decían que nunca habian creido en mí y que sabian que era malvado.
Una situación de autentica risa, era algo inconcedible, solo cambie mis acciones durante un año, seguías siendo el mismo, llevando el mismo traje, incluso comprando el mismo desodorante y aun así, me creían el peor villano jamás conocido.

Hoy, en el 100º aniversario de mi primera aparición, aquí en la Fortaleza de Exprión frente a mis antiguos aliados y apunto de entregarme, me doy cuenta de que un año en el salón de los infames, no es respaldado por muchos años de “servicio” a la comunidad.
Pero probablemente no me pase nada, total ; soy Trícon, ¿qué me puede pasar?

José Manuel Ángel Rivera