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Viernes 20 de Abril
A la entrada del colegio estaba con mis amigas platicando sobre lo que llevaríamos mañana a la fiesta de Matías, estaba muy emocionada, porque ya sabes que Matías es el chico que me gusta, es tan lindo y guapo. Después de que quedamos Imelda, Martha y yo de vernos en la parada del autobús enfrente de la casa de Lucas nos fuimos a nuestras casas. Hice mi tarea de Mate, y en la noche entre al messenger no había casi nadie conectado porque ya pasaban de las 10 PM solo estaba Juan, mi mejor amigo, platicamos un rato me dijo que no iría a la fiesta de Matías porque su mama y su papa lo había castigado por las calificaciones en literatura, me puse algo triste pero le di muchos ánimos, iría a su casa y le llevaría un pedazo de pastel, vi mi reloj y era muy tarde, me fui a dormir y soñé que Matías y yo nos dábamos un beso.
Sábado 21 de Abril (Cumpleaños Matías)
En la mañana me levante súper emocionada, me bañe y vestí muy rápido, desayune huevos con jamón, con jugo de naranja, salí corriendo de la casa para verme con Imelda y Martha como te lo había contado. Fuimos a comprar el regalo de Matías al centro comercial, yo le compre una bolsa de canicas de muchos colores, a mí me gustaron mucho y esperaba que a el también le encantaría, mientras que mis amigas le compraron el siguiente libro de Harry Potter, que esta buenísimo, y un reloj de pared.
Llegamos no muy tarde a la fiesta, su mamá nos recibió con jugos de frutas, pero lo emocionante esta por suceder... así que agarrate que ahí voy.
Pasadas las horas, se hacia mas tarde, la mama de Matías se había ido junto con los demás adultos a la cochera mientras que los niños aventados como mis amigas y yo estábamos dentro en el cuarto de Matías, íbamos a jugar a la botella, ese juego donde te das de besos en la boca, mi corazón estaba latiendo muy rápido, participaron Matías, Martha, Nena, Osvaldo, Jerónimo, Cesar, Cristina y yo. Imelda la aburrida no quiso que porque sus papas no la dejaban, pero ni modo, ella se lo perdió.
El primer turno fue para Matías porque era su cumpleaños, giro la botella, te prometo que mi corazón estaba apunto de salirse y le toco besarse con Nena, esa niña me choca, porque es súper presumida, Matías se levanto y le sonrió a Nena, ella le dijo que solo podía darle un beso en la mejilla porque estaba enferma de la gripa, ¿Qué suerte la mía no? Sentí un gran alivio, Nena giro la botella y le toco Osvaldo de nuevo le dieron un beso en la mejilla que aburrido, a la derecha de Matías estaba Osvaldo, giro la botella y le toco besarse con Martha mi amiga, se dieron un beso súper larguísimo, nunca había visto a alguien besarse en persona, nomás lo había visto por la televisión, sentí mariposas en el estomago, le pregunte a Martha que sintió y me dijo que fue algo muy rico, mi corazón latió de nuevo, sentía que me iba a desmayar. Yo sabia que como podía tocarme Matías, podía tocarme cualquiera de los otros niños, yo no quería a nadie mas que a Matías, estaba nerviosa, Martha giro la botella quien apunto a Cristina, como dos niñas no podían besarse perdió su oportunidad y se la paso a Cristina quien me apunto a mi, había llegado mi oportunidad, tome la botella en mis manos, creo que hasta estaba temblando giro la botella y pedía que me tocara Matías, por favor Matías, por favor Matías, la botella se detuvo apuntando a Cesar, sentí que las piernas se me hacían gelatina, yo no quería levantarme pensaba inventarme algo como Nena, para no besarme con el, pero que tal si me tocaba después Matías, me puse de pie y el también lo hizo, todos nos miraban, tenia muy vergüenza, nunca había besado a nadie, Cesar se acerco y me tomo la cara, yo apreté mis ojos para esperar el momento, apenas si me toco los labios, para echar un paso atrás, yo los abrí para reclamarle cuando me di cuenta de que detrás de nosotros estaba la tía de Matías, nos saco a gritos y jalones a todos del cuarto de Matías, para después darnos santo regañadon, lo bueno que no le dijeron nada a mis papas porque si no, imagínate lo que hubiera pasado. Pero estuve apunto de darle un beso a Matías.
Domingo 22 Abril
Hoy me robaron un beso.
Me levante muy temprano recordando la fiesta de ayer y lo que estuve apunto de hacer, creo que ahora me gustaba mucho más Matías, estaba muy feliz, también recordaba el pequeño beso de Cesar, me pregunto como se habría sentido si me lo hubiera dado completo, que tal si me comenzaba a gustar Cesar, me hacia estas preguntas para luego bajar a desayunar.
En la tarde fui a la casa de Juan para llevarle un pedazo de pastel de la fiesta de Matías, su mama me recibió y me paso a su cuarto el aun estaba en pijama, pero como conocía a Juan de toda mi vida no había nada de problema, no le daba pena que lo viera así, también le conté lo que había sucedido en la fiesta de Matías, el se rió a carcajadas de mi gran hazaña, me dijo que le hubiera gustado verme con las piernas hechas gelatina, a mi no me hizo gracia lo que dijo, luego le pregunte ¿Alguna vez haz besado a alguien? El me dijo que una vez estuvo a punto de besar a Nena, pero que recibió una cachetada por eso, me reí como el se rió de mí, después hubo un silencio incomodo, pensaba que se sentiría ser besado, quería preguntarle a Juan, pero algo me detuvo, estaba muy nerviosa de pronto, no sabia lo que me pasaba, el tampoco me decía nada, el tema de los besos se había vuelto muy complicado, quise cambiar el tema pero tartamudee, el se dio cuenta de mi nerviosismo, pero no dijo nada, yo estaba sentada en el suelo y el en su cama, el se sentó en el suelo conmigo y me dijo. –Sabes yo también me he preguntado como se sentiría un beso, pero me da mucha pena contarlo. –A mi igual.
Entonces se me ocurrió una idea... –Juan, hacemos esto? Nos besamos para saber que se siente y no le decimos a nadie. La cara de Juan fue de sorpresa, pero igual que yo quería sentirlo, me asintió con la cabeza, éramos amigos, nos conocíamos de siempre, que podría pasar, a mí me gustaba otro chico, no pasaba nada.
No sabíamos por donde empezar, nos pusimos rojo tomate, tratábamos de imitar la escena de una película, antes ya lo habíamos hecho pero nos reíamos, ahora estábamos muy nerviosos, le tome la mano y me acerque a el con los ojos cerrados, no sabia donde estaban sus labios, me sentí un poco tonta, porque no sabia a donde iba, el me tomo la cara y se acerco a mi, y sentí algo tibio en mis labios, tibio y húmedo, eran los labios de Juan que se deslizaban en los míos, pude saborear su aliento, nuestro beso fue largo, no sabíamos que estábamos haciendo, pero lo hacíamos, el movía su cabeza y sus labios sobre los míos, sentí también un alguito de su lengua que toco por un segundo mis labios, realmente se sentía muy bien, ya no pensaba en Matías, pensaba en Juan. Nos miramos un corto tiempo, yo quería repetirlo, pero no sabia si Juan lo quería, me acerque y quien lo beso fui yo, fue algo muy bonito, Juan me tomo de la mano, después de que nos besamos, y me sonrió. –Sofía me gustas mucho.
Yo no sabia que responder, me gusto mucho lo que habíamos hecho, pero ¿ y Matías?, que ahora no sé, creo que estaba en un segundo plano, estaba confundida, un beso podía cambiar mi vida en un segundo, ahora me pregunto si esto hubiera pasado con Cesar.
Ahora no sé que hacer, me gustaría que pudieras hablar y decirme que hago, después del beso le dije a Juan que tenia que regresar a terminar mi tarea de Mate, la cual ya termine desde el viernes, pero quería salir, es que lo quiero mucho y no se si me gusta o no. En la noche me metí al messenger y me dijo que desde hacia tiempo le gustaba pero que no sabia como decírmelo, tenia miedo, yo no se que haré, espero pronto resolver este problema.
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