Lanza un hechizo mortal / El Sello de Satán

Los Ángeles 1948. Todo el mundo utiliza la magia

La magia lo domina todo, en un mundo donde los unicornios cruzan las carreteras, los monstruos salen hasta en la sopa...

H.Phillip Lovecraft comparte su oficina de detective con una bruja legalizada y con licencia para ejercer.

El detective le debe la renta del despacho, al que apenas acuden clientes

pero la sequía de ingresos parece que va a llegar a su fin, pues a Lovecraft le contratan para buscar un libro robado de su biblioteca.

el Libro no puede ser otro que El Necronomicón.

El investigador privado descubre que la intención de su cliente es utilizar el libro maldito para abrir la puerta de dioses ciegos e idiotas

Yog-Sothoth, Cthulhu y todos los demás, que van precedidos de criaturas monstruosas

con las que intenta acabar de la única manera que sabe: utilizando su pistola, en lugar de emplear la magia como todos los demás .

Estos seres monstruosos con aspecto de gárgolas medievales se muestran como seres grotescos y absurdos.

En una película del género negro no puede faltar la mujer fatal, que canta en un cabaret y fuma con una sensualidad estudiada

y también aparecen las mujeres aparentemente angelicales y vírgenes necesarias para las invocaciones demoníacas.

pues, conseguido El Necronomicón ya es posible invocar al Gran Cthulhu y que pueda reclamar una joven virgen para completar la ceremonia

y así surje la Gran Monstruosidad de los Tentáculos abriéndose paso desde las profundas entrañas de la tierra

es un ente viscoso con rasgos grotescamente parecidos a los humanos

como el Ojo Vigilante que tanto tiempo ha estado durmiendo en una muerte aparente

continúa la ceremonia, pero la joven elegida para el sacrificio no era tan pura como requería la ocasión

así que en su lugar un monstruoso tentáculo de Cthulhu atrapa al Oficiante y se lo lleva a las profundidades de la falla de San Andrés, cerrando la puerta y librando al mundo del peligro durante otros 666 años.