Tres Traducciones del Relato The Festival de H.P. Lovecraft

Criterios de Traducción © Henry Armitage



Nemesis © Dr. Cyrus Llanfer - Pulsar sobre la imagen para ver detalles

Dedicado a la antigua Logia del Tentáculo y a su fanzine Revelaciones Insanas, donde apareció este artículo.

 

A través de las puertas del sueño custodiadas por los gules,
Más allá de los abismos de la noche iluminados por la pálida luna,
He vivido mis vidas sin número,
He sondeado todas las cosas con mi mirada;
Y me debato y grito cuando rompe la aurora, y me siento
Arrastado con horror a la locura.

(Nemesis, H.P. Lovecraft)

 

Los relatos de H.P. Lovecraft están traducidos de acuerdo a los gustos personales de los traductores y pocas veces respentan los textos originales. Como ejemplo, se han analizado tres traducciones propuestas para el relato The Festival, escrito por H.P. Lovecraft en 1923. En esta historia el narrador acude al antiguo pueblo de Kingsport para tomar parte en unos rituales ancestrales, más antiguos que la propia humanidad, que empiezan con una procesión que recorre las calles del pueblo hasta las catacumbas escondidas bajo la vieja iglesia en Central Hill.

A continuación se comentan algunos de los criterios adoptados por los traductores siguientes:

Enrique de Obregón, Eduardo Haro Ibars y Francisco Torres Oliver han realizado tres propuestas de traducción para el relato The Festival de H. P. Lovecraft. Son tres propuestas radicalmente distintas, con objetivos y aspiraciones marcadamente diferentes. Los dos primeros pretenden la claridad y fiabilidad por encima de cualquier otra concesión literaria, mientras que el último suele sacrificar el original para conseguir unos logros literarios y estéticos, que no siempre coinciden con las habilidades verbales del autor norteamericano.

Criterios de traducción:

     

    I. Utilización del término original inglés

     

    * It was the Yuletide that men call Christmas (1)

    * Era el Yuletide, que los hombres llaman Navidad (2)

    * Era el Día del Invierno, ese día que los hombres llaman ahora Navidad (3)

    * Era el solsticio de invierno que los hombres llaman Navidad (4)

     

    La palabra Yuletide verdaderamente presenta ciertas dificultades de traducción. Los diccionarios bilingües suelen dar la acepción de "Navidad", pero resulta evidente que el original mismo quiere marcar las diferencias entre la festividad cristiana de Navidad y esa celebración pagana, que se pierde en la memoria del hombre y que exaltaba el solsticio de invierno.

    Obregón ha optado por mantener la palabra tal y como viene en el texto original, sin tener en cuenta que esa religión arcaica y cósmica que pretende rescatar Lovecraft no es patrimonio de la cultura británica, sino que pertenece a las raices más profundas y antiguas de la humanidad.

    Torres Oliver, por el contrario, se ha acercado a la intención del autor con una traducción más bien explicativa, aunque el efecto final llegue a resultar algo ambiguo. Actitud que lleva al extremo la versión de Haro Ibars.

     

    1. II. Supresión de una o más palabras
     

    La supresión de palabras, de difícil traducción, se hace bastante sistemático en la versión de Torres Oliver. Este traductor cuida mucho el resultado final. En la mayoría de los casos, el lenguaje que emplea es correcto y, ante una palabra problemática, que le pudiera llevar a una traducción torpe o desmañada, opta con la supresión limpia, como se muestra en los siguientes ejemplos:

     

    * They had hanged four kinsmen of mine for witchcraft in 1692, but I did not know just where. (5)

    * En 1692 ahorcaron a cuatro de mi raza por brujería. (6)

    * En 1692 habían ahorcado a cuatro de mi estirpe por brujería, pero no sabía el lugar exacto de la ejecución. (7)

    * En el año 1692 habían ahorcado por brujería a cuatro parientes míos, pero yo no sabía dónde. (8)

     

    El traductor parece querer corregir el estilo del autor que está traduciendo, así que simplemente suprime una frase innecesaria, que rompe el ritmo del relato.

    * [I] wished bitterly that no forefather had summoned me to this primal rite (9)

    * Ojalá que ningún antepasado mío hubiera exigido mi asistencia a un rito de ese género. (10)

     

    Las versiones de los otros dos traductores recogen , con mejor o peor fortuna, las dos palabras del original:

    - Enrique de Obregón: deseé amargamente que ojalá ningún antepasado mío me hubiera convocado para asistir a este rito primitivo (11)

    - Eduardo Haro Ibars: deseé amargamente que ningún antepasado me hubiera convocado a aquel rito primigenio (12)

     

    * the thin, whining mockery of a feeble flute (13)

    * el doliente acento burlesco de una flauta (14)

     

    Mientras Francisco Torres Oliver sale airoso del intento, suprimiendo las palabras molestas, las otras dos versiones luchan por mantener un contacto directo con el texto original:

    - Enrique de Obregón: la fina y gimiente burla de una débil flauta (15)

    - Eduardo Haro Ibars: la evanescente y delgada burla de una débil flauta (16)

    Siempre se ha hablado de prestigio en el caso de las traducciones de Torres Oliver, pero en muchas ocasiones se trata de evitar al máximo un riesgo; pues, sin lugar a dudas, son traducciones arriesgadas las de Obregón y de Haro Ibars, ya que son más vulnerables a la crítica del propio lector que se podría preguntar: "¿Qué es una flauta débil?" o bien, "¿Qué es eso de delgada burla?"

     

    1. III. Recreación literaria
     

    La recreación literaria es una práctica bastante común en la traducción de Torres Oliver. Se podrían poner muchos ejemplos, donde el traductor parece querer dejar la huella de sus propios recursos estilísticos, unas veces mejorando ciertas torpezas estilísticas del autor norteamericano, pero en otras ocasiones dando la espalda a recursos tan del gusto de Lovecraft, como la utilización de un lenguaje de rancias resonancias antiguas, en su intento de recuperar una ambientación arcaizante a base de expresiones antiguas y pasadas de moda como gibbet, kinsmen o wayfarers, expresiones que los diccionarios recogen como auténticas antigüedades pasadas de moda. En Lovecraft es intencionado el uso de ese lenguaje quaint (17), como el que utilizaría uno de sus propios personajes de ficción en el relato:

    * the gowned, slippered old man in the doorway had a bland face that reassured me; and though he made signs that he was dumb, he wrote a quaint and ancient welcome with the stylus and wax tablet he carried. (18)

     

    1. IV. Uso excesivo de pronombres personales como transposición de los originales
    2. Como es sabido, la estructura flexiva del verbo español hace innecesario el uso del pronombre personal sujeto, característica que no comparte el verbo inglés casi carente de una conjugación, sustituida por la presencia continua del pronombre, que funciona como auténtico prefijo. Esto es algo que hay que tener en cuenta a la hora de traducir, suprimiendo los pronombres innecesarios y colocando con acierto aquellos que el contexto inglés da como enfáticos o simplemente necesarios para evitar ambigüedades. Como muestra de esto, basta comparar los textos que se presentan a continuación:

      - Yo estaba lejos de mi hogar [...], yo hice el camino a través de la ligera capa de nieve recién caída [...] hacia la muy antigua ciudad que yo nunca había visto [...] yo había llegado al final a la antigua ciudad marítima; [...] donde ellos también habían mandado a sus hijos para que celebraran el festival [...] Yo fui el único que regresó aquella noche a la vieja ciudad pesquera. (Enrique de Obregón) (18)

      - Me encontraba lejos de casa [...], proseguí la marcha en medio de aquel abismo de nieve recién caída [...] a esa antiquísima ciudad, en la que jamás había estado [...] y por fin llegaba yo al antiguo pueblo marinero [...] Al viejo pueblo llegaba, cuyos habitantes habían ordenado a sus hijos, que celebraran el ceremonial [...] Yo era el único que regresaba aquella noche al viejo pueblo pesquero (Francisco Torres Oliver) (19)

      - Me hallaba lejos de mi hogar [...], continué mi camino sobre la nieve fresca [...] hacia la muy antigua ciudad que nunca había visto [...] y al fin me encaminaba a la antigua ciudad costera [...] en la que habían ordenado a sus descendientes que celebrasen la festividad [...] Yo era el único que volvió aquella noche a la vieja ciudad de pescadores (Eduardo Haro Ibars).

      Como puede observarse, el número de pronombres utilizados varía de un traductor a otro. En los fragmentos seleccionados, Obregón hace uso de seis pronombres, Torres Oliver dos y Haro Ibars solamente uno.

     

    1. V. Glosar un término, una referencia cultural
     

    En ocasiones los traductores, al realizar su trabajo, no pierden de vista el hecho de que este tipo de literatura va dirigido al gran público y, por lo tanto, suelen allanar el camino para una inmediata comprensión de referencias culturales, mediante la glosa o explicación de términos que presupondrían unos conocimientos previos.

    Compárese las traducciones de Aldebaran twinkled among the trees:

    - la estrella Aldebarán titilaba entre los árboles (20)

    - Aldebarán - tembloroso entre los árboles (21)

    - Aldebarán parpadeaba, brillante, entre los árboles (22)

    La traducción explicativa de la estrella de Aldebarán resulta del todo innecesaria, ya que sería suficiente con la traducción de los elementos contextuales. En el texto de Lovecraft el Narrador dice: I pushed on through the shallow, new-fallen snow along the road that soared lonely up to where Aldebaran twinkled among the trees, de manera que la estrella queda perfectamente contextualizada al encontrarse en lo alto y titilar (o quizá mejor centellear) entre los árboles.

    Tanto el verbo twinkle (23), como sus equivalentes castellanos titilar (24) o centellear (25) , nos aproximan al significado de la palabra Aldebarán, lo que no hace necesario la aclaración de que se refiere a una estrella. Sin embargo, Obregón acierta con la elección del verbo, mientras que los otros dos traductores recurren a expresiones prosopopéyicas, que personifican a la estrella como cuerpo humano que tiembla o guiña los ojos; son recursos estilísticos de gran mérito, pero que alejan las versiones traducidas del texto original.

     

    1. VI. Distribución caprichosa de párrafos

     

    VII. Vocabulario lovecraftiano

     

    Lovecraft

    Torres Oliver

    Obregón

    Haro Ibars

     

    Ghoulishly

    Blasphemous

    Pulpy

    Ominous

    Impious

    Maggoty

    Fungous

    Leprous

    Viscous

    Amorphously

    Hideous

    Abhorrent

    Gangrenous

    Amorphous

    Putrescent

    Pest-gulfs

     

     

    impío

    pulposos

    abominable

    impías

    infestada

    fungosa

    leproso

    viscosa

    amorfo

    horrible

    detestable

    gangrenoso

    amorfo

    pútrido

    abismos pestilentes

     

    Vampirescamente

    blasfemo

    pulposos

    ominosa

    impías

    agusanada

    esponjosa

    leproso

    viscosa

    amorfo

    horrible

    abominable

    gangrenoso

    amorfo

    pútrido

    abismos pestíferos

     

    vampíricas

    blasfemo

    pulposos

    ominosa

    impías

    horadada

    fungosa

    leproso

    viscosa

    amorfa

    horrible

    aborrecible

    gangrenoso

    amorfo

    pútrido

    pestíferos golfos

     

    La lista, que recoge términos muy marcados de la prosa lovecraftiana, se podría tomar como una tabla de muestras aleatorias y serviría para demostrar algunos de los criterios adoptados por los tres traductores:

    Francisco Torres Oliver

    Es un traductor que se arriesga muy poco. Apenas se detectan equivocaciones en sus traducciones. No le importa sacrificar el texto original, siempre que obtenga un resultado final bien acabado. Esto le ha llevado a ganarse un prestigio como buen traductor, aunque habría que hablar más bien de excelente estilista. Trabaja los textos con la mirada puesta en la lengua destinataria. En caso de duda, suprime, simplifica o transforma el pasaje que está traduciendo.

    Enrique de Obregón

    Es un traductor literal. Se concede muy pocas libertades con el texto original. Aún así podemos encontrar errores de diccionario verdaderamente escandalosos. Sin embargo, el resultado suele ser una versión bastante plástica y moldeable, ya que somete la lengua a ejercicios morfológicos procedentes de la flexibilidad del inglés.

    Eduardo Haro Ibars

    Se presenta como un traductor apegado al texto original, pero que tiende más a la glosa y la explicación. En ocasiones se deja engañar por esos "false friends", que siempre acechan al traductor, como aquí ocurre con la palabra "gulfs" (abismos). Por otro lado, no cuida el detalle. Da traducciones muy de primera mano, sin pulir.

     

    VIII. Claras equivocaciones de traducción

    * Wisely did Ibn Schacabao say, that happy is the tomb where no wizard hath lain, and happy the town at night whose wizards are all ashes. (26)

    * Juicioso fue Ibn Schacabao cuando dijo, qué feliz es la tumba donde ningún lagarto ha yacido, y feliz la ciudad de noche cuyos lagartos son todos cenizas. (27)

     

    Este fragmento corresponde al final del relato; y, por lo tanto, es presumible entender que Lovecraft ha localizado en el pasaje el clímax de la narración. La equivocación es a todas luces garrafal, puesto que la lectura de la traducción nos va a alejar radicalmente de las intenciones del autor. Se podría llegar hasta la falsificación entendiendo rasgos humorísticos, que el autor jamás pretendió. Obregón ha confundido las palabras wizard y lizard, destrozando así ese carácter solemne y arcaico que Lovecraft ha querido dar al Libro Maldito, al Necronomicón.

     

    * Sabiamente dijo Ibn Shacabad: bendita la tumba donde ningún hechicero ha sido enterrado y felices las noches de los pueblos donde han acabado con ellos y los han reducido a cenizas. (28)

    * Sabiamente dijo Ibn Schacabao, que feliz es la tumba donde no ha sido enterrado ningún brujo, y feliz en la noche aquella ciudad en la que los brujos sean sólo cenizas. (29)

     

    Hechiceros o brujos, que son la representación del mal, y no los lagartos de Obregón, que representan la soledad y el abandono.

     

    * For it is of old rumour that the soul of the devil-bought hastes not from his charnel clay (30)

    * Porque dice un viejo rumor que el alma de los retoños del diablo no se aleja rápidamente de su envoltura putrefacta (31)

    IX. Reproducción de los arcaismos

* las simas negras del océano inmemorial (Torres Oliver)

* los golfos más negros del océano inmemorial (Obregón)

* los más negros golfos del océano inmemorial (Haro Ibars)

 

Algo parecido ocurre con la palabra bonnet: Small, round head-dress without a hard brim, usu. tied under the chin, worn by women and children. (35) Es esa especie de gorro de tela o pañuelo, que las mujeres llevan en las películas del oeste norteamericano. En todo caso, es algo que no tiene nada que ver con la palabra "bonete": "Especie de gorra, comúnmente de cuatro picos, usada por los eclesiásticos y seminaristas, y antiguamente por los colegiales y graduados." (36)

 

* a bent old woman in loose wrapper and deep poke-bonnet (37)

* una mujer vieja y encorvada, envuelta en una bata suelta y con la cabeza cubierta por un profundo gorro (Haro Ibars)

 

* una vieja, ataviada con ropas holgadas y bonete de paño

(Torres Oliver)

* "una anciana vestida con una bata y tocada con un gorrito picudo"

(Obregón)

 

Nuevamente los ejemplos no solamente ponen de relieve lo que se quiere exponer, sino también los criterios de traducción que se han ido planteando hasta el momento:

1) Torres Oliver sintetiza, simplifica, elimina términos que le resultan molestos.

2) Haro Ibars realiza una traducción al pie de la letra, hasta extremos de llegar a expresiones sin sentido como "profundo gorro".

3) Obregón da traducciones aproximadas y, a veces, bastante arriesgadas, lo que le lleva a equivocaciones bastante evidentes como "gorrito picudo".