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"...pero si volveis a crucificarme,¡malditos...seais!... ."
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| Sinopsis | Una pequeña comunidad de la Jutlandia occidental, hacia 1930. El viejo Morten Borgen dirige la granja de Borgensgaard. Tiene tres hijos: Mikkel, Johannes y Anders. El primero está casado con Inger y tiene dos hijas pequeñas, aunque en estos momentos Inger está embarazada y esperan el tercero. Johannes es un antiguo estudiante de teología que, por haberse imbuído en sus estudios (sobre todo en Kierkegaard), e identificarse constantemente con la figura de Jesucristo, es considerado por todos como un loco. El tercero, Anders, está enamorado de la hija del sastre, líder intransigente de un sector religioso rival.
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| Crítica | 
Puntuación
del crítico: 10 |
Una de las más indiscutibles obras maestras del cine. Una película filmada y escrita con un estilo realmente personal, introduciéndonos en un pequeño poblado danés lleno de personajes cotidianos que actúan como lo haría cualquier otro, sin nada de teatralidad ni sensiblería falsa.
El film se centra, sobre todo, en los problemas de fe de la familia y sobre todo en la gente del pueblo. Morten cree que Dios de alguna forma lo ha abandonado, pero él es creyente y ama a su Dios, Johannes se ha vuelto loco por sus dudas religiosas y el hijo mayor no cree, aunque su mujer siempre le dice que en su corazón hay bondad suficiente como para amar a Dios.
A pesar de ser un film muy profundamente religoso (Adjetivo que no tiene nada que ver con conservador), he de decir que es totalmente apto para ateos, entre los que me encuentro yo mismo.
Las actuaciones son perfectas y todos los personajes entran profundamente en sus papeles, la utilización del blanco y negro, de las luces y sombras, de la cámara, es muy impresionante. Algunos fotogramas parecen verdaderos cuadros. Atentos a la diferencia de iluminación : cuando están en la casa del protagonista, es una luz más clara, diáfana ; mientras que en la casa de los oscurantistas, es más oscuro todo, reforzando la teatralidad y falsa fe que los inunda.
La película es lenta, casi avanza en tiempo real, nos envuelve en el ambiente familiar de este grupo de daneses. Una escena que destacaría es la espera ante el parto de la chica, en la cual todo está en silencio y solo se oye el tic-tac de un reloj en el salón, y de pronto aparece Johannes y todo toma un aire de irrealidad, una atmósfera onírica.
En resumen, es una película bellísima, una apuesta diferente del gran maestro Dreter, hermosa técnicamente y en cualquier sentido, llena de reflexiones acerca de la fe del hombre, tocando también de una forma profunda el tema de Cristo y sus milagros. Sobresaliente, una de mis favoritas.
PD : Atentos siempre a Johannes. El actor está sencillamente perfecto, y el personaje es lo más inolvidable de un film ya de por sí inolvidable.
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Waster | | |
Ficha de Película enviada por Waster el 29 de Abril de 2004 |
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