La acabo de revisar ahora mismo y tengo que reftificar una cosa: James Woods no merecía una nominación al oscar...SE MERECÍA EL OSCAR así con todas las letras. Su interpretación seria y contenida me pone los pelos de punta, está soberbio. La memoria no me ha fallado, el film me gusta mucho y tiene varios momentos que se me pone el nudo en la garganta. Gran crítica al sistema. Destacable también el trabajo del genial Robert Sean Leonard ("Rebeldes del Swing"). Como curiosidad, la película está producida por Oliver Stone (que ya había trabajado con Woods en "Salvador") y está dedicada a Sam Peckinpah.
