Llevo años asistiendo al Festival del Cómic de Barcelona, y no se porque cada año me gusta más. Los primeros años de aficionado s Dragon Ball (hace décadas ) quería coleccionarlo todo y aprender artes marciales (kung fu, karate, aikido, ninjitsu, etc). Pasada la euforia del novato, me calmé un poco, y pensé que perdería la ilusión... Pero me sorprendo a mi mismo yendo a este Festival en Torroella disfrutando como un niño/adolescente, y lo mismo entrenando artes marciales chinas. Para no enrollarme más, sólo decir que el festival estuvo muy bien, más pequeño y tranquilo que el de Barcelona, pero para mi gusto bien organizado. Además el pueblo está bonito y pasé un día completo dando un paseo y comiendo comida de la zona.