Puntuación
del crítico: 8 |
Pese a haber muerto el Makkron, los stroggs siguen combatiendo a los humanos que han atacado su planeta. El marine Matthew Kane ve como su pelotón es acosado por los stroggs y, pese a que parece que la victoria está cerca, algo muy horrible se aproxima...
Si no conoces la saga Quake, es que no eres un buen aficionado al mundo de los videojuegos. Nacida en 1996 con el primer "Quake", cambió, un poquito más, el mundo de los shooters, introudciendo graficos de verdad en tres dimensiones, dejando a un lado el uso de sprites bidimensionales que fingían dichas tres dimensiones.
El juego fue un exito. Poco después nos llegaría "Quake 2", con más argumento, mucho mejores graficos y desviado en otra dirección, dispuesto a crear su propio mundo y dejar de parecerse a esa bestia parda que es "Doom". Cumplió con creces su cometido hasta el punto de que sigue siendo, a día de hoy, uno de los mejores shooters que nos podemos encontrar, y todo un clásico, no a la altura de su primera entrega, pero siguiendola muy de cerca.
No tardó en salir "Quake 3: Arena", enfocado más al juego multijugador, con una campaña para un solo jugador bastante descuidada pero repleta de acción desde el primer momento hasta el ultimo. Toda una gozada del entretenimiento.
Y en 2005 nos llegó esta cuarta parte, que enlaza con los hechos ocurridos en la segunda, esto es, nos encontramos en el planeta de los stroggs, poco después de que el Makkron haya sido aniquilado por el protagonista de "Quake 2" (al que, por cierto, se le menciona un par de veces). Somos Matthew Kane, un marine que encabeza un pelotón de asalto de los que quedan para terminar de aniquilar a la belicosa raza. Pero puede que los stroggs se guarden un as en la manga.
"Quake 4" es uno de los mejores shooters que nos podemos encontrar. Sí, no es "Bioshock" ni "FEAR", pero es un shooter de los pies a la cabeza, con un planteamiento la mar de clásico, diversión sin fin, un argumento bastante cohesionado y miles de enemigos a los que destrozar con nuestras modernas armas. Vaya, como antaño.
El argumento es bastante simple, pero efectivo. Es más, incluso tenemos un giro argumental a mitad del juego, que no desvelaré, y que resulta toda una sorpresa. Sí, la historia podría haber dado más de sí, pero hay que saber dónde estamos. Es una trama sencilla, directa, resultona y con algun gran momento.
Los graficos, incluso seis años después (cuando escribo esto) están geniales. Basados en el motor del "Doom 3" quizas adolecen de parecerse demasiado a éste. Y es que, muchas, muchas veces, creeremos que estamos cazando demonios en Marte, en vez de horrendas deformaciones andantes creadas por los stroggs. Más variedad no le habría sentado nada mal, pero lo dicho; incluso hoy, podría medirse con los más fuertes, y resistir.
El plantel de armas y enemigos es bastante completo. Quizas se pueda echar en falta más enemigos finales, o más dificiles (aunque el último, si no sabes qué hacer, tiene bastante dificultad). Hay una gran variedad de enemigos de a pie y, la dificultad, está bastante ajustada. No es juego fácil, tampoco imposible, pero hay zonas dificiles que pondrán en jaque al mejor de los jugones, aunque sea tan solo por unos segundos.
Y, por supuesto, está la novedad de poder manejar vehiculos y la de ir con apoyo, tanto para los momentos en los que la vida la tenemos muy baja, como si tenemos necesidad de más armas a nuestro lado.
Resumiendo, un gran shooter con todos los elementos que deben contener todos, desarrollado con un estilo clásico que saborearemos todos los que crecimos con "Doom", "Wolfenstein" y, sí, el primer "Quake". Una delicia.
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