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Último número que publica Planeta del Capitán Marvel, con el final de la saga “Crazy lyke a fox”, traducida aquí en “Como un cencerro”. Y por si ha alguien le quedaba dudas aún, Peter David vuelve a dar muestras de porque es uno de los mejores en el panorama actual.
En esta saga vemos como Genis se recupera de su locura, aceptando sus responsabilidades. O eso parece, que en al final David nos hace dudar de nuevo si las explicaciones de la recientemente resucitada madre de Genis estaban en lo cierto. Además de esto, tenemos la incorporación de la hermana de Marvel, personaje que apunta maneras. Lastima que a la serie no le queden más que seis números en su edición americana.
Una vez solucionado la trama que empezó con el relanzamiento de la colección en los USA, David nos devuelve en el último número de la edición española a dos personajes secundarios de la anterior etapa, Marlo y Dragón Lunar, quien sabe si para dejar atado los cabos sueltos de la colección antes de su desaparición. Y tampoco nos podemos olvidar de la vertiente cómica, que poco a poco se deja notar de nuevo (como cuando Rick hace el chiste de los Titanes y Robin, o cuando, de nuevo Rick, le pregunta a Phyla el que hace leyendo Marville).
En la parte gráfica tenemos a Paul Azaceta dibujando la primera saga y a Aaron Lopresti el principio de la segunda. El primero no lo hace nada mal, quizá sus rostros sean algo difusos, pero por culpa del no entintado de la colección. En cambio a Lopresti, la falta de entintador le beneficia, dejando un dibujo claro y conciso.
Esta serie vale mucho la pena, David consigue que un don nadie, que además mancillaba el nombre del Capitán Marvel original, se convierta en uno de los mejores personajes del momento.
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