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Ficha libro:
Título original: This Immortal
Editorial: Bibliópolis Fantástica
Autor: Roger Zelazny
Traductor: Joaquín Revuelta
Nº páginas: 218 Págs.
Precio: 19, 95 €
Tu, el Inmortal compartió con Dune el Premio Hugo a la mejor novela del año 1966, como se comenta en la introducción a esta reseña fue el detonante de la Nueva Ola de la ciencia ficción y está considerada como uno de los grandes clásicos de la ciencia ficción… E incomprensiblemente, desde 1985 no había vuelto a ser reeditada en España.
Pero para solucionar eso aquí está Bibliópolis Fantástica que, junto con otras tantas pequeñas y medianas editoriales dedicadas al fantástico, se arriesga y saca productos que las grandes editoriales ni siquiera se plantearían publicar.
La primera pregunta que se haría cualquiera es ¿ha envejecido mal la novela, tantos elogios en su día eran excesivos y no era para tanto la cosa?
Mi respuesta a estas cuestiones sería que es una obra que no ha envejecido ni un ápice y no están equivocados quienes la consideran un clásico, aunque para leerla y comprender porqué se ha convertido en un clásico hay que tener en cuenta que su publicación en 1965 marcó un antes y un después en la literatura de ciencia ficción y que, además de inaugurar el movimiento de la Nueva Ola, logró que, desde entonces, la mayoría de la literatura de ciencia ficción con pretensiones se escribiera tan bien como cualquier otra de las grandes novelas de la literatura general.
También debe tenerse presente que Tú, el Inmortal es una narración que ofrece varias lecturas y debajo de lo que aparenta ser una sencilla y entretenida novela de aventuras se esconde una obra mucho más profunda.
Tras una guerra nuclear la Tierra quedó devastada y las escasas colonias humanas existentes fuera del planeta fueron ayudadas por una raza alienígena conocida como los Veganos, que ayudaron a repoblar y reconstruir la Tierra, para convertirla a posteriori en un protectorado de su gobierno.
Años después, Conrad Nomikós, antiguo terrorista que se opuso al gobierno colonialista Vegano, es una de las mayores autoridades del gobierno colonial de la Tierra y recibe el encargo de escoltar y guiar a un Vegano durante su viaje por la Tierra. En este viaje por un planeta en pleno proceso de reconstrucción deberá decidir si quiere salvar o no al planeta.
Como puede verse sólo con leer el breve argumento que les doy de esta novela, siempre teniendo en cuenta la fecha en que fue escrita la obra, es que su argumento fue más allá de lo que ofrecían incluso las novelas de ciencia ficción “seria” hasta entonces, cuyo estilo era digno de la literatura pulp que dominó los clásicos de ciencia ficción de la Edad de Oro, como Fundación de Asimov.
Aquí las tornas se invierten y son los humanos los seres débiles que deben ser gobernados, por su bien, por los extraterrestres. El héroe desde un principio se nos muestra como una persona desencantada hacia los ideales por los que luchó y por los métodos que empleó para alcanzar sus fines que dista mucho de ser el héroe prototípico de la ciencia ficción para quien el fin siempre justificaba los medios y si hacía algo, por lo cuestionable que fuera desde el punto de vista moral, estaba bien hecho, porque para eso era el “bueno”. Y la frontera entre el bien y el mal se diluye, quedando claro que hay malos que no lo son tanto; mientras que otros supuestos buenos, no son tan “buenos” (recordemos el pasado como terrorista del protagonista).
Además de la construcción de los personajes (aunque algunos parezcan planos, todos son sólidos y de apariencia realista), del trasfondo de la historia (que incluye referencias sobre la realidad política que se vivía en el mundo cuando fue escrita la novela) o de la historia en sí, otro de los elementos más logrados de la obra es la sabia mezcla de elementos de ciencia ficción, junto con otros propios de la literatura clásica -véase El Corazón de las Tinieblas- o de los escritos y la mitología de la Grecia clásica.
Y los elementos de la mitología griega juegan una baza fundamental en el desarrollo de los argumentos, pues no sólo sirven para crear el decorado de parte de la historia, con esos niños mutados por las radiaciones que recuerdan a seres mitológicos, si no que sirven para definir las personalidades de los personajes o para marcar el curso de la historia, convirtiéndose Tú, El Inmortal en algo que podría calificarse como una “Odisea” ambientada en un futuro no demasiado lejano.
Poco me queda por decir de esta novela, aparte de resumir que se trata de una gran obra que además de aportar una notable calidad literaria, aporta unas buenas horas de entretenimiento.
La novela está complementada en el volumen editado por Bibliópolis por un extenso estudio en profundidad sobre esta obra firmado por Iván Fernández Balbuena.
El estudio merece la pena y aporta tanto que puede servir hasta de inspiración a la hora de redactar la buena crítica que esta novela se merece, al aportar información sobre las referencias eruditas que contiene y que a más de un reseñador pueden pasársele desapercibidas (y lo digo por propia experiencia).
José Luis Mora
jmazarias@dreamers.es
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