Colin Diamond, el peligroso y simpático dueño de un garaje, lo está pasando francamente mal. Ha descubierto que Liz, la mujer de su vida desde hace más de 20 años, va a dejarle por un joven y apuesto camarero. Colin no puede aguantarlo y tiene una crisis nerviosa, hasta que cuatro amigos deciden hacerse con la situación. Secuestran al amante y le encierran en una casa abandonada para que Colin pueda recuperar la hombría perdida a través de la venganza. Colin el cornudo tiene al causante de sus penas entre las manos. Se celebra un juicio irregular, pero Colin no está capacitado para ser juez y menos aún, verdugo. La vida del camarero pende de un hilo. ¿Hará Colin lo que se espera de un hombre como él y matará al rival? ¿O agachará la cabeza y liberará al enemigo, dejando que su esposa se vaya y quedándose solo con su dolor? (FILMAFFINITY)
Crítica
Puntuación del crítico: 6
Film británico de aspecto teatral, con pocas localizaciones y diálogos que emplean la palabra "fuck" veinte veces por minuto.
Es en verdad una rareza, no demasiado original (hay ecos de "Reservoir dogs"), que parece querer convertirse en otra cult-movie como fue "Sexy Beast", sin lograrlo.
El reparto es su punto fuerte, con lo más granado de la gran bretaña: John Hurt (un poco pasado de rosca pero graciosete), Ray Winstone (el mejor de la función, otra gran performance de este coloso), Ian McShane (mostrando su versatilidad), Tom Wilkinson (tan bien como de costumbre), Stephen Dillane (sorprendente actor al que habrá que seguir de cerca).
Lo malo es que al guionista se le va la olla con algunos diálogos pretendidamente filosóficos que aburren más que otra cosa. Acaba derrochando su potencial y finalmente decepcionando.
Merece verse no obstante por todos estos actorazos juntos y algún momento aislado.
Davis
Ficha de Película enviada por DAVIS el 1 de Agosto de 2010