Este es uno de esos cómics que son, a mi parecer, imprescindibles y que necesitan leerse en esos momentos en los que uno se siente perdido, ya que es posible encontrar de nuevo el camino, la motivación y muchas buenas sensaciones que dejará en cada una de sus páginas. Con un corte de dibujos muy clásico pero que llena, aunque sin tonalidades muy vivas, es capaz de transportarte poco a poco en la vida del protagonista, haciendo que te sientas más unido en él en cada una de sus aventuras y mientras te cuenta la historia de su vida. Es posible que a muchas personas les haga soltar más de una lágrima, algo que a mí me ocurrió.