Clifford Peache es un tímido y estudioso muchacho recién llegado a Chicago. Nuevo en el instituto Lake View, no tarda en convertirse en el objetivo de un grupo de compañeros empeñados en hacerle la vida imposible. La pandilla, liderada por una agresivo adolescente llamado Moody, le amenaza cada día para quitarle el dinero del almuerzo. En una ocasión llega a enfrentarse con ellos, aunque casi le cuesta la dentadura. Afortunadamente llega en su defensa Ricky Lindermann, un solitario y fornido compañero del que se rumorea que mató a su propio hermano. Clifford le ofrece a Ricky un trabajo como guardaespaldas y los dos se convierten en inseparables amigos, hasta que la banda de gamberros encuentran a un matón capaz de pelear contra Lindemann. Pero a éste, su pasado le atormente, se niega a pelear, y se recluye en casa. Es entonces cuando Clifford descubre la verdad sobre los rumores que ensombrecen el pasado de su mejor amigo. Clifford descubre que Lindermann no mató a su hermano sino que se trató de un accidente ocurrido cuando los dos jugaban con una pistola, pero Lindermann se siente culpable. La banda de gamberros sigue hostigando sin piedad a Clifford, que tiene que pelear solo contra sus acosadores. Justo cuando las cosas parecen no tener remedio, Lindermann vuelve para enfrentarse de una vez por todas a la pandilla que atemoriza a su mejor amigo Clifford.
Crítica
Puntuación del crítico: 8
Buen debut en la dirección de Tony Bill (actor y productor de películas como "El golpe"). Ante todo es una película sobre la amistad. Divertida, con momentos emocionantes y buenas actuaciones. Matt Dillon haciendo de chulito macarra en una de sus primeras actuaciones y Ruth Gordon en su último papel, que recuerda ligeramente al de la inolvidable abuelita que hizo en "Harold y Maude". Sorprendente Adam Baldwin. Bonita película y con unas peleas bien hechas para la ocasión.
Davis
Ficha de Película enviada por DAVIS el 20 de Mayo de 2005