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Desde hace tiempo estoy aqui sentada, sin hacer nada. Medito, tomo agua, y no pasa nada. Miro la ventana y recuerdo aquellos momentos de felicidad de mi juventud. Cuando reia, cuando sonreia y era feliz. Cuando viajaba en automovil, cuando jugaba, cantaba. Recuerdos que vuelan y se esfuman como mi edad.
¿Tan vieja estoy?
Mi espalda, mi piernas, mis dedos me dicen que si, apenas si los puedo mover. Mi alma siempre joven y mis ojos brillantes son negacion del pasado.
Me siento tan sola en mi silla. Me siento aveces tan triste. Nadie me llama. Nadie se acuerda de mi. Tan lejos esa juventud plena, mi primer beso, mi primera caricia, mi primer joven error, el que nunca me lo perdone, mi vida era compartida por aquel ser que vivia en mis adentros, que se alimentaba de mi, de mi sangre, de mi vientre, de mi amor calido y una soledad inesperada.
Sin embargo, aquel ser al crecer, se fue tan lejos que ya no se nada, creo que no se acordara de mi, se avergüenza de mi, ya que mis carnes me cuelgan,¿sere acaso tan inutil? ¿sera porque eso que ya no me quiere?
Mi espalda y mis dientes resuenan. Ahora todo ese camino es borroso y fugaz. Cerrare los ojos y desaparecere por un momento, nadie se dara cuenta y cuando llegue el final voy a sonreir.
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