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Muchos le volarían la tapa de los sesos | |
La típica crítica hacía Byrne suele incluir los siguientes puntos:
-No dibuja tantos fondos como antes: Es evidente que en algunos primeros planos y en algunas escenas de acción no los dibuja, pero eso lo ha hecho desde los 70, y me parece un recurso narrativo valido una vez establecido correctamente el decorado de la escena, pero la verdad mirando sus tebeos no veo que use menos fondos que la mayoría de los dibujantes actuales, de hecho hasta diría que está en la parte alta de la media. En fin que si no me molesta cuando lo hace Quitely o cuando lo hace Urasawa no me va a molestar que lo haga el bueno de Jhon.
-Sus tintas son una mierda: Hombre no nos engañemos, no es Mark Farmer, pero entinta mucho mejor que hace 20 años cuando se encargaba de los 4F y de Alpha Flight, entonces sí que era increíblemente guarro y malo entintando, actualmente cumple con los requisitos que yo considero mínimos en un entintador, o mejor dicho en un dibujante que acaba sus páginas a tinta. Eso sí en los 90, cuando le dio por añadir ciertos toques de la escuela Image a sus acabados se hizo un flaco favor, me gusta más su tinta actual, es más orgánica y clásica, lo cual pega más con su estilo de dibujo y el tipo de historias que cuenta.
-Dibuja con el culo: Pues dibujará con el culo, pero lo hace muy bien. Desde luego que hace años que dejo de lado el preciosismo en el acabado de sus páginas para centrarse más en aspectos menos llamativos del dibujo, pero más importantes en el resultado final; ya no busca epatar gráficamente, si no usar el dibujo como una herramienta para contar la historia que tiene en mente, y resulta que esa herramienta la domina perfectamente y es capaz de dibujar cualquier cosa, desde cualquier ángulo y hacerlo bien en un tiempo record. Vamos lo que normalmente se asocia con la madurez creativa de un dibujante y es aplaudido como un estado de dominio del oficio dejando de lado el ego por destacar con un dibujo espectacular para cumplir con su cometido narrativo.
-Ya no es el que era en los 4F: Vayamos por partes, entinta mejor, con los años no ha parado de continuar asentando sus habilidades como dibujante, en los 4F ya dejo de lado el preciosismo gráfico de los X-Men, sus habilidades técnicas como guionista han crecido notablemente desde entonces.....................vamos que no. Sigue contando historias de evasión con los mismos ingredientes: Acción, aventura, ciencia ficción, superhéroes y una narrativa a prueba de bomba; la única diferencia es que en los 4F se le notaba la emoción de la novedad y eso le daba una frescura que ahora ya no tiene, pero calidad sigue teniendo tanta o más, lo demás me temo que son prejuicios y nostalgia.
-Sus historias apestan: A Byrne se le nota mucho cuando hace las cosas con ganas y evidentemente en Chapter One lo hizo por la pasta y por esa manía de friqui que tiene, según la cual ha de dejar su huella en todos los personajes clásicos, por otro lado cuando un proyecto le gusta le salen historias tan apañadas como en los 80. Sus ideas no son peores que las que tenía hace 20 años y las cuenta con una habilidad de auténtico maestro, a diferencia de Claremont no sabe contar correctamente sus ideas, buenas y malas, si no tiene como dibujante a un gran narrador que supla sus carencias.
Y por supuesto que tiene cosas malas. Es evidente que desde los 4F continua orbitando alrededor de los mismos temas y coordenadas estéticas, vamos eso tan poco cool de no romper los límites a cada paso que das y quedarte tranquilamente haciendo lo que te gusta: Tebeos de evasión y aventuras, pues vale ¿y que?. El tío se considera un artesano del entretenimiento y para mí es uno de los mejores, no veo donde está el problema mientras siga haciendo buenos tebeos de evasión y entretenimiento. Personalmente lo que más me molesta de su obra (y no solo la actual) es el hecho de que por elección personal, friquismo mal entendido o las presiones del mercado caiga en esa especie de trampa mortal que es la nostalgia superheroica, la misma enfermedad que estropea muchos tebeos de Busiek y que desluce muchos de los de Alan Davis. Ese ansia por satisfacer al friqui de los superhéroes que lee sus tebeos, y al que llevan dentro, hecha a perder parte de sus magníficas habilidades de artesanos para hacer tebeos de entretenimiento. Eso y el tono de “aventurilla blanca” que tiñe muchos de sus últimos trabajos que a veces parecen estar destinados solo a niños con los conocimientos y manías de un friqui cuarentón. Sus trabajos un poco más oscuros como OMAC, 1112 o los primeros Next Men son también aptos para casi cualquier público y me resultan mucho más naturales.
Por supuesto esta es solo mi opinión, pero es que me cabreá mucho ver como se desprecia por sistema a un autor que no lo merece mientras no se para de alabar a Jhon Romita JR, que no es que no lo merezca, pero tiene los mismos defectos y virtudes que Byrne. De hecho Romita si que ha acabado teniendo un estilo de dibujo un tanto bizarro a diferencia de Byrne que simplemente ha dejado de lado el preciosismo innecesario. Y de verdad de la buena que yo disfruto lo mismo con sus tebeos actuales que con la última relectura que hice de sus 4F, y da gusto tener a un autor tan constante que siempre me entretiene y a veces consigue que me lo pase realmente muy bien. Incluso vaticino que dentro de unos años será puesto en un altar casi tan alto como el de Jack Kirby, el cual creo que también paso por un etapa de ostracismo similar a la que está pasando Byrne actualmente, después de haber sido ElPutoAmo durante años, vamos el típico movimiento pendular en los gustos del público: anonimato, consagración, degradación, otra consagración y otra vez al olvido.
En fin, que Byrne Aún Mola.
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