En el momento de su estreno, esta película supuso todo un fenómeno en el Reino Unido y copó los primeros puestos en las listas de las películas más taquilleras de este país. Y no es para menos, pues esta sátira, dirigida por un especialista en series de televisión para la televisión británica, resulta una mordaz y entretenidísima crítica hacia nuestros gobernantes (y hacia los que nos dejamos gobernar por ellos) sobre un tema que, hoy en día, sigue de candente actualidad. Así, usando a los ficticios presidentes de los Estados Unidos y Reino Unido, este realizador nos presenta una hipotética situación en la que estos dos mandatarios deciden que les conviene iniciar una guerra por sus propios intereses. ¿Les suena de algo esto?
Con esta premisa, lo que nos mostró Iannucci fue un retrato poco complaciente sobre cómo funcionan por dentro nuestros Gobiernos, empezando por el Presidente hasta llegar al último funcionario, y cómo la opinión pública (nosotros) nos dejamos manipular fácilmente, a poco que se lo propongan. El estilo narrativo que usan es el del falso documental que popularizaron series como The Office, y esta forma de relatar la historia juega mucho en favor de potenciar la historia mayor, en detrimento de los personajes individuales que la protagonizan. Sobre este asunto, decir que esta película cuenta con un reparto muy coral y sus escritores, pese a contar con tantos personajes, trabajaron hasta el más mínimo detalle la personalidad de cada uno de ellos. Todos son un prodigio de la construcción y los diálogos que pronuncian cada uno de ellos vale su peso en oro. Sin embargo, un punto en contra que pueden tener reside en que ninguno de ellos cuenta con algún punto positivo y son todos ellos -pese a contar con la mejor de las intenciones- seres mezquinos. Debido a esto, puede que más de un lector no empatice con ellos y deje de seguir con tanto interés la historia.
Aun así, es un punto menor en una cinta que, de antemano, ya exige un esfuerzo para los espectadores que se animen a verla. Y es que, pese a que en ocasiones los guionistas se exceden en su sarcasmo o sus ansias por no dejar títere con cabeza y sus personajes no nos resultan cercanos, In the Loop es una grandísima película que no tiene nada que envidiarle nada a clásicos de la sátira política como ¿Teléfono rojo, volamos hacia Moscú? Sin duda, aparte de su guión, el otro punto interesante de esta película lo encontramos en sus actores, donde podemos encontrarnos con gente tan notable como Peter Capaldi, que borda la interpretación de su personaje, Malcolm Tucker.
En resumen, In the Loop es una película más que recomendable. Y de la edición en DVD llevada a cabo por AVALON, hay que comentar que a pesar de que se echa de menos una mayor abundancia de extras, no está nada mal y resulta toda una sorpresa encontrarnos como extra con el cortometraje El momento justo, de Gonzalo Visedo y Hugo Serra, un buen corto que todos deberíamos ver.
Jose Luis Mora
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