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Mónica Aragón es una gran actriz a quien hemos visto trabajar en conocidos

 programas y series de televisión, además de en numerosos cortometrajes o en montajes teatrales. Es una persona que derrocha talento y buen hacer por todos sus poros y, también, es alguien cuyo trato es muy cercano y la simpatía que transmite resulta contagiosa entre quienes la rodean.

Últimamente está que no para, participando en diversos proyectos, y para nosotros ha sido un auténtico placer realizarle la entrevista que leeréis a continuación.

-Empezamos con la pregunta que solemos hacerle a todos nuestros entrevistados. ¿En qué momento decidiste que lo tuyo era la interpretación?

Jo, pues no lo sé. En realidad, en mi caso ha sido un proceso un poco natural, muy influido sobre todo por el ambiente en el que he crecido y lo que he estado viendo desde que era muy pequeña. Dedicarme profesionalmente, supongo que como con catorce o quince años, lo vi muy clarísimo.

-¿Te marcaste alguna meta en el momento que decidiste ser actriz?

No, en realidad me marco metas muy a corto plazo porque la meta final creo que en realidad es, poder seguir viviendo de esto. Trabajar en lo que te gusta ya de por sí es una suerte y un privilegio. Entonces, mientras pueda seguir haciéndolo cada día es una meta nueva. Fenomenal.

-¿Crees que es importante formarte como actriz en cursos y talleres para poder realizar mejor tu trabajo?

Hombre yo creo que todo siempre aporta muchísimo. No es imprescindible y luego depende mucho de cada uno. Creo que de todo lo que hagas se aprende, ya sea un curso, ya sea ir a ver teatro, cine o de cualquier cosa. De todo se aprende muchísimo, por lo que a mí me parece bien, yo lo hago siempre que puedo.

-Uno de los primero trabajos donde te pudimos ver fue de presentadora de Club Disney, ¿cómo se adapta un actor / presentador, para trabajar frente a un público infantil?

Para mí no fue nada difícil, nada raro, porque realmente era como crearte un personaje.

Tú estás presentado y sí es cierto que es algo que se parece mucho a ti. Pero no siempre eres tú, porque muchas veces estas presentando y a lo mejor tienes un mal día, o te encuentras mal y, al igual que un personaje, tienes que dejar todo eso fuera y enfrentarte a presentar. Es mucho más fácil, porque es mucho más coloquial y muchas veces no te ves condicionado, pero está igual. Tienes un texto que memorizar y tienes algo a lo que dirigirte. En lugar de no mirar a la cámara tienes que mirar, es la única diferencia.

-¿Son más exigentes lo niños que los adultos como público?

Por supuesto, eso está clarísimo. Porque un niño, si no le gusta lo que esta viendo, se da la vuelta o se va o coge el mando y cambia de canal. Un adulto a lo mejor tiene más prejuicio a la hora de hacer eso y a lo mejor aguanta lo que está viendo por educación o porque no le queda otra, pero un niño, en absoluto. Y son super exigentes y super críticos con lo que les gusta y lo que no les gusta.

-En televisión estuviste varias temporadas trabajando en Médico de familia con un personaje fijo, ¿de qué forma se prepara un actor un papel que va a estar ahí durante muchos episodios y que sabe que tiene que evolucionar?

En realidad, no sabía que iba para muchos episodios. Mi personaje en Médico de familia iba para dos episodios pero luego parece que funcionó muy bien y decidieron mantenerlo. Realmente no te preparas pensando que va a haber muchos capítulos, te prepara el día a día, y mientras dure, estupendo y cuando se acabe se acabó. Estas cosas son así, y desgraciadamente, hoy en día tampoco te puedes preparar para muchos capítulos. En aquella época sí era un poco mas sencillo, pero eso no lo afrontas como si fuera un trabajo a largo plazo, sino que vas haciendo el día a día y vas creando y desarrollando el personaje según te van dando los guiones. Tampoco lo puedes desarrollar a largo plazo, porque los guiones te los dan uno a uno y no sabes qué va a pasar en el futuro del personaje.

-También te hemos podido ver en papeles episódicos en series como Cuéntame, ¿Cómo te preparas un personaje que sabes que no va a tener continuidad?

Yo los preparo todos de la misma manera, trato de abordarlos lo mejor posible y me da igual si son para un capítulo o para doscientos. Me da igual, yo creo que los preparo de la misma manera, con la misma seriedad y la misma profundidad, o no profundidad, depende del personaje.

-Cambiando de tercio, también has trabajado mucho en teatro, ¿cómo llevas eso de trabajar delante del público?

Es lo que más me gusta. Me encanta hacer televisión y me encanta hacer cine, pero creo que el directo, a pesar de que todos los días estés haciendo lo mismo, cada vez es diferente y tener del público una reacción inmediata a tu trabajo es una gozada, es superbonito.

-Has participado en obras como Cabaret o Diez negritos, ¿qué sensación se tiene al interpretar al mismo personaje y la misma historia varios días a la semana?

Cada día es diferente, porque aunque estés haciendo lo mismo, primero tú no te encuentras siempre exactamente igual y el público no es el mismo, con lo cual la respuesta es diferente. Pero a lo mejor tú estas igual pero tu compañero que te está dando la replica no está igual y pasan muchísimas cosas en el día a día del teatro. Unos días sale una función estupenda, otro día no estás tan contenta, otros días a ti te parece un horror y al público le ha parecido maravillosa... tiene esas cosas el día a día.

-Actualmente estás de gira con la obra Extraño anuncio de Adolfo Marsillach, ¿qué sientes al ver que interpretas un personaje creado por un grande del teatro?

Es un lujazo. En realidad interpretar cualquier personaje, lo haya escrito quien lo haya escrito merece todo el respeto del mundo, eso para empezar. Pero, claro, un grande de la historia del teatro de aquí... bueno no sólo aquí, que en Latinoamerica también es un autor muy considerado, para mí fue un lujazo. Cuando me dijeron que me habían dado el papel, me dio muchísima alegría y más cuando está dirigida por su viuda, su última mujer Mercedes Lezcano, que nos ha dado muchas pistas sobre lo que realmente en cada momento el autor quería decir con el texto, porque le conocía como nadie.

-¿Cuál es tu papel en Extraño anuncio?

Es una obra, como su título indica, un poco extraña. No transcurre en orden cronológico, y el espectador muchas veces no sabe si lo que esta viendo es la realidad o es un sueño del protagonista, bueno mas que un sueño una pesadilla. Y para no darte muchas pistas, por si vienes a verla o alguien que está leyendo esto viene a verla, te cuento solamente que soy una chica que va a alquilar un piso donde empiezan a suceder cosas un tanto extrañas.

-Tras estar en Madrid, ahora os vais de gira, ¿en qué ciudades se va a poder ver Extraño anuncio?

Pues mira de momento hemos estado en Valencia, estaremos por la zona de Galicia (no sabemos las fechas exactas) y, de cara al verano, tenemos poquita cosa, pero a partir de septiembre estaremos en la red de teatro de la Comunidad de Madrid y varios sitios más que todavía están por confirmar.

-¿Qué tal se lleva eso de ir de gira con una obra por distintas ciudades?

Jo, pues es una gozada porque conoces un montón de sitios, comes en un montón de sitios y conoces a un montón de gente. La verdad, es que es una oportunidad. Creo que a mucha gente le gustaría viajar tanto y, a lo mejor, por su trabajo no puede. Yo me lo planteo disfrutando del momento y de la oportunidad de poder conocer tantos sitios a la vez que estoy trabajando.

-¿Y qué les dirías a los espectadores para animarles a ver la obra?

Que es una obra que no les va a dejar indiferentes. A lo mejor les encanta o les horroriza, pero se van a quedar seguramente dándole vueltas a lo que han visto. Es algo muy diferente a lo que puedan haber visto hasta ahora. Creo que nunca se ha representado en un teatro una pesadilla de un personaje, y esto es eso la pesadilla del protagonista.

-En teatro has participado también en obras como Erase una vez, ¿qué te llevó a meterte a producir una obra?

Siempre me ha gustado la parte de detrás tanto del cine como de la televisión, de hecho tengo parte de mi familia que se dedica a la producción. Fue una aventura que me propusieron, que surgió y que en ese momento me apetecía mucho intentarlo. La verdad es que fue una gran experiencia con la que aprendí un montón.

-¿Qué tiene de especial para ti el circo para que siempre hayas participado en espectáculos circenses?

Pues no lo sé, supongo que es lo más parecido al teatro, y luego está la oportunidad de viajar, de conocer un montón de sitios y de hacer algo totalmente diferente, porque el circo es un mundo aparte de la televisión, de cine y del teatro. Es muy diferente y es un gusanillo al que de vez en cuando apetece volver.

-Y otra vez con los niños como espectadores...

Efectivamente y, además, en directo que es casi peor que en la tele.

-¿Tienes pensado en un futuro seguir trabajando en el circo?

De momento no, pero ya veremos a ver cómo vienen las cosas.

-Pasemos a los cortos, ¿cuál es la razón que te anima a trabajar en pequeñas piezas de cine en las que se trabaja por amor al arte?

Porque la mayoría de las cosas que he hecho en ese mundo es porque la historia me atraía bastante y sobre todo por la gente con la que he trabajado. Siempre he trabajado con gente con la que me apetecía trabajar, entonces me daba igual que no hubiera remuneración por medio. Aparte, creo que el corto es un medio que, tal y como están, las cosas debería potenciarse muchísimo más.

-Haciendo repaso de tus cortos, tu primera colaboración con Pippo Martinez fue en Va a ser que no, un corto pequeño que iba al grano sobre ciertos problemas que suelen tener las parejas, ¿cómo lograste darnos una interpretación tan cercana?

Sobre todo porque nos lo pasamos muy bien haciéndolo. Fue un corto en el que no tuvimos ensayos ni nada y Dani Rovira, el otro protagonista, y yo nos conocimos apenas una hora antes de empezar a rodar, pero sin embargo tuvimos una química muy divertida y estuvimos hablando durante esa hora mientras nos cambiábamos de ropa y nos maquillábamos. Estuvimos hablando del personaje y enseguida coincidimos muy bien en el punto de vista de cómo queríamos que fuera esa pareja y sobre todo, el corto es divertido, pero todo lo que no se ve del corto es más divertido todavía, porque nos reímos muchísimo haciéndolo.

-Después, en Eso es todo te tocó hacer de sargento de policía, ¿tuviste que documentarte o prepararte para meterte en ese personaje?

Ya había hecho algunas cosas parecidas y la verdad es que era un papel muy cortito y fue bastante sencillo. Era una sargento de policía muy dura, muy borde y me hace mucha gracia porque siempre me han dado muchas veces papeles así y yo no soy así para nada, todo lo contrario y me divierte mucho hacer de borde y de mala.

-Con Pippo has rodado Desayuno para tres, ¿qué nos podremos encontrar en ese corto?

Desayuno para tres es un corto muy curioso donde las conversaciones no son lo que parecen. O sea... son varios personajes, son dos desayunos distintos en una cafetería, y cuando justo el espectador cree que esta entendiendo lo que esta pasando, de repente se le da la vuelta y el final de la historia no tiene absolutamente nada con lo que el espectador pensaba.

-Acaba de estrenarse ¿Jugamos? de Elisabeth Almeda, ¿cuál es el personaje que interpretas en ese corto? 

Pues es un poco yo. Los personajes de ese corto son dos actores que viven juntos, vamos que son pareja. En mi caso, no comparto vida con un actor, pero sí, de hecho soy yo y Javier es Javier. Somos dos actores que comparten vida aparte de la profesión. 

-El último corto que has rodado es Alienada. Ahí creo que te toca hacer de mala...

A mí me toca hacer... (risas) ¿Lo puedo contar? me toca hacer de algo que no había hecho nunca. Es un personaje muy curioso y la verdad al principio iba a hacer el otro personajes y cuando el director me dijo que iba a hacer el personaje que hago en el corto casi que me hizo más ilusión todavía.

¿Hacer de mala? Sí, porque me gustaba mucho el personaje desde que leí el corto.

-Ahora acabas de rodar un largometraje rodado en varios países, ¿es complicado eso de esperar a que te llamen según los planes de rodaje, etc de un largo?

Pues hombre en este caso, sí. Fue un poco complicado porque rodamos muchísima parte en Barcelona y luego se rodaba también en Italia y en Francia, pero claro fue bastante complicado gestionar los permisos de rodajes. Cuando ya piensas que no se va a terminar de rodar y que el proyecto se ha caído, entonces "pum" te llaman y sí, eso crea un poquito de tensión.

-En la película hay varias escenas de acción, ¿te dan algún entrenamiento previo antes de que te toque actuar?

En esta película en concreto no, porque tampoco era un presupuesto para tener un coach de armas pero bueno si de echo son cosas que en serio en películas de mas presupuesto si se hace, aparte de esto yo creo que tenía un poco de ventaja, porque yo si he echo aparte como formación un curso de manejo de armas, entonces para mi fue bastante sencillo.

-¿Fue divertido rodarla?

Es divertido pero es complicado, porque es muy técnico y dependes también mucho de los efectos especiales, y debes tener cuidado con un montón de cosas. O sea, no te tienes que centrar solo en la interpretación, sino también en la técnica y en todo lo que esta pasando a tu alrededor, pero es divertido, y cuando el resultado queda bien, mucho mejor.

-Acaba de estrenarse Behaviors, ¿qué nos puedes decir sobre esta película?

Es una película hecha con presupuesto 0. Ha llevado dos años de trabajo completarla y está destinada a su difusión y descarga gratuita a través de internet. Fue seleccionada para la sección "Midnight in Málaga" del pasado Festival de cine español de Málaga que fue donde tuvo lugar su estreno oficial y ahora continua su andadura por diversos festivales nacionales e internacionales. Se puede descargar a través de la web oficial de la película http://www.cineadrede.com/ o a través de http://www.autoeditados-distro.com/TS/behaviors/

-Para terminar, ¿puedes contarnos algo sobre algún futuro proyecto en el que vayas a estar metida?

Pues no te puedo contar nada porque ahora mismo, aparte de la gira de Extraño anuncio, está la cosa muy chunguilla y de momento hay poquitos, vamos nada confirmado, así que no te puedo contar mucha cosa.

-Gracias por tu amabilidad, eso es todo.

José Luis Mora

-Web oficial de Mónica Aragón.

-Página oficial de Mónica Aragón en Facebook.

El 22 de mayo a las 20h, tenemos preparada una nueva sesión de Cortos con Ñ en La Escalera de Jacob de Lavapiés. En total, proyectaremos cinco cortometrajes muy recientes de diversa temática. De ellos, tenemos el honor de estrenar tres después de su paso por el Notodofilmfest y proyectaremos otros dos que acaban de estrenarse.

Todos los cortos que se proyectan en Cortos con Ñ compiten por el Premio del Público de nuestro festival, que está patrocinado por Promofest, distribuidora que otorgará 50 bonos de distribución al corto ganador del premio. 

-"Ojos que no ven", de Natalia Mateo.

Asunción Balaguer, Ana Wagener, Carlos Olalla, Raquel Pérez, Luis Callejo, Canco Rodríguez, Esther Ortega, Teo Planell y Jemima Vizcarro Memba.

Todas las familias guardan secretos y mentiras; y todo el mundo se plantea alguna vez soltarlo todo.

Pero ¿cuándo hacerlo? ¿cómo? ¿uno a uno? ¿de golpe en una reunión familiar? Hoy, el día de NOCHEBUENA, no parece el mejor momento. En NOCHEBUENA hay que disfrutar, porque viene PAPA NOEL, porque hay niños. Esta noche los secretos son a voces y la mentira flota en el ambiente. Pero aún así, qué más da una mentirijilla más, será la última. Mañana, sí, mañana ya se lo contamos todo. De momento, abuela, FELIZ NAVIDAD.

Tenemos el honor de ser uno de los primeros festivales de cortos de Madrid que proyectan el nuevo cortometraje dirigido por Natalia Mateo, una de las musas del cortometraje en España que ha dirigido pequeñas joyas de nuestro cine como "Qué divertido" o "Test". Ganador de tres Roeles en su estreno en el Festival de Cine del Campo, en el argumento de "Ojos que no ven" podemos ver muchas de las inquietudes o temáticas presentes en otros trabajos de esta realizadora. Así, aquí se habla de las relaciones entre padres e hijos o de cómo usamos las mentiras para intentar proteger a la gente que queremos de algo que es mejor que no sepan.

La historia que nos cuenta Natalia Mateo está muy pegada a nuestra realidad y en el guión la realizadora demuestra todo su talento para perfilar personajes con los que cualquiera nos podríamos sentir identificados. El relato que elabora entretiene y contiene momentos muy divertidos; pero también nos cuenta cosas muy serias que nos atañen a todos, haciendo que este corto de Natalia Mateo sea algo más sombrío que sus anteriores trabajos.

Por último, hay que hablar de un nutrido reparto formado por grandes actores que hacen un trabajo sobresaliente al meterse en la piel de unos personajes que la realizadora definió de una forma tan buena, dotándolos de tantos matices. Le dan un toque muy humano a sus personajes tan sincero y contenido que consiguen darle la emotividad necesaria a sus interpretaciones.

En resúmen, "Ojos que no ven" es un gran cortometraje que se acaba de estrenar y le auguramos un largo recorrido por festivales.

-"Sex_Tape 6", de Roberto Lolo.

Con Alba Messa, Víctor Alcázar y Natalia Gaminde.

Un chico coloca a escondidas una cámara para grabar un vídeo porno casero...

Roberto Lolo es un prolífico autor de cortos que nos ha regalado títulos tan imprescindibles como "O Castello dos batallón" o "Triste soledad de un violinista". Siempre deseoso de intentar encontrar nuevas formas de contar historias, ideó este pequeño cortometraje que tiene algunos elementos que lo emparentan con el cine experimental.

La premisa es sencilla. ¿Qué ocurriría cuando alguien se encuentra una cinta porno casera y decide ver qué contiene? De este modo, los espectadores nos convertimos en esos voyeurs que se atreven a visionar su contenido, provocando que veamos una situación que sorprenderá a más de uno.

Sin ánimo de desvelar nada importante del argumento de este cortometraje, os diremos que el realizador ha metido mucho humor negro en algunos parajes y ese estilo de cámara casera es muy apropiado para lo que pretende contar. El corto engancha y nos deja pegados a las butacas, pendientes de ver qué va a pasar entre esta pareja que protagoniza el vídeo porno casero.

Alba Messa y Víctor Alcázar son los protagonistas del cortometraje. Ambos son muy buenos actores y le imprimen un aire muy espontáneo a sus interpretaciones. En una propuesta que intenta ser casi documental los dos hacen que su modo de comportarse ante las cámaras esté muy ajustado a lo que debería pasar realmente en una situación como la que viven. Además, "Sex_Tape 6" cuenta con la aparición estelar de Natalia Gaminde, una actriz que lo hace muy bien en ese pequeño papel que aquí interpreta.

En fin, que no debéis perderos este buen cortometraje que sorprenderá a más de uno y que tenemos el honor de estrenar, tras su paso por el festival online del Notodofilmfest.

-"Los Secretos de Miren", de Ray Marhuenda Pic

Con Laura de Pedro, Andrea Dueso. Ramón Marhuenda y Rikar Gil.

Miren es una mujer con un mundo interior diferente, vive la vida de los demás. Su vida es su tesis, un estudio sobre los patrones de conducta, según ella todos somos hoy resultado de lo que nos pasó ayer. Entre entrevistas, fotos y estudios decide dar un paso más allá y graba secretos a la gente con su cámara de video. Lo que ella nunca imaginó es que todo este proceso le haría salir de su burbuja y afrontar su secreto más íntimo.

Ray Marhuenda dirige un relato de corte intimista que trata sobre cómo muchas veces, encerrados en nosotros mismos, no llegamos a conocer cómo somos realmente y no dejamos salir muchas cosas que llevamos dentro. Mezclando la ficción más clásica con otra parte de falso documental -donde Miren estudia la vida de los demás en esa tesis que elabora-, esta historia se mueve con un tono pausado para que vayamos conociendo poco a poco cómo es Miren y cuál es su evolución como persona mientras va saliendo de esa burbuja en la que vive.

El ritmo narrativo del corto logra que se profundice muy bien en la personalidad de Miren y que veamos cómo es ella realmente. El corto conecta enseguida con los espectadores y provoca que todos estemos pendientes para saber cómo es la protagonista y ver qué va a hacer con su vida.

La fotografía le saca mucho partido tanto a los lugares donde está rodado y en muchas secuencias es una parte esencial al estar muy integrados los escenarios con lo que les ocurre a los personajes.

De los personajes, sobre todo Miren, hay que decir que tienen unas personalidades perfectamente desarrolladas y que los actores que se encargan de interpretarlos efectúan un espléndido trabajo al comprender lo que Marhuenda quería hacer con ellos y qué escondían dentro de ellos. Primero, los actores que protagonizan las distintas historias que ve Miren en su tesis están perfectos en sus papeles, dándole al corto un envidiable aura de verismo. Después, Andrea Dueso secunda perfectamente la labor de Laura de Pedro, actriz que da vida a Miren, quien realiza un gran trabajo para hacer un retrato creíble y cercano de un personaje tan complejo como Miren.

Sin duda, "Los secretos de Miren" es un cortometraje redondo que nos hará pensar muchas cosas sobre nosotros tras verlo.

-"La Magia del Camino", de Sonia de Carlos y Juanjo Domínguez.

Con Sira Blázquez y Rafa H. Barbáchano.

Un peregrino que trata de sacar conversación se encuentra con la magia del camino...

Sonia de Carlos y Juanjo Domínguez firman un pequeño y muy bien realizado cortometraje ambientado en el Camino de Santiago. El argumento es muy sencillo y se basa en la conversación que mantiene un peregrino con un lugareño que se encuentra, mientras busca un camino que le conduzca a Santiago de Compostela. Con ello, los realizadores tejen un divertida historia protagonizada que tiene en su honestidad y falta de pretensiones dos de sus principales puntos fuertes.

El guión está muy bien escrito y en pocos minutos relata una situación curiosa protagonizada por dos personas que tienen muy poco en común. Los diálogos son muy buenos y resultan tan dinámicos que no queda ni un solo punto muerto en la narración, haciendo que siempre esté pasando algo en cada instante. Además, ese sentido del humor tan sano que impregna cada fotograma está muy bien llevado y los espectadores disfrutarán con algunas de las cosas que pasan.

Los actores hacen un trabajo estupendo y le dan un toque muy tierno -y algo alocado en algunos instantes- a  los personajes que interpretan. Desde un primer momento sabemos cómo son y poco a poco vamos sabiendo cuáles son sus intenciones.

El cortometraje consigue que todos terminemos con una sonrisa en los labios nada más terminar de verlo y, para nosotros, es un placer estrenarlo tras su paso por el Notodofilmfest.

-"Amor Radiocontrol", de Edgar Lledó.

Con Mariam Hernández y Txema García.

Bueno, ¿qué pasa?

Edgar Lledó idea un bonito relato romántico sobre una pareja que tiene un modo muy especial de comunicarse. Con una cocina como único escenario, el responsable del guión condensa en unos minutos lo que significa el amor verdadero y qué hacen muchas personas para mantener viva esa llama.

La propuesta que nos hace el realizador es sumamente original y está muy bien aprovechada para que ese método que tienen de hablar entre ellos forme una parte importante de la historia y no se quede en una mera anécdota. El argumento del corto discurre de una manera bastante plácida y su autor juega mucho con eso de recrear el ambiente cotidiano que se vive todos los días en ese hogar. No hay nada forzado en lo que nos cuentan y tampoco nada que caiga en el romanticismo empalagoso. Así, lo que nos entregan es un retrato realista y próximo sobre cómo es una relación de pareja que funciona porque sus dos partes se quieren, pase lo que pase.

Mientras, la factura técnica del corto es muy buena y el montaje, junto con la fotografía, están siempre al servicio de unos personajes que, como se ve, están creados desde el corazón. Destilan humanidad por los cuatro costados y aunque uno de ellos nunca está presente en pantalla, podemos ver cómo son, cómo actúan y qué están pensando.

De este modo, casi todo el peso en la parte interpretativa recae en Mariam Hernández, una actriz que pone todo su talento -que es mucho- al servicio de un personaje que sería todo un regalo para cualquier actriz que tuviera que meterse en su piel. Mariam, con sus gestos, su manera de pronunciar los diálogos o sus miradas nos transmite cualquier cosa que lleva dentro su personaje en cada momento y logra que nos creamos lo que le está pasando, como si estuviéramos viendo algo que está pasando realmente.

Estrenado en el festival de cortos online Notodofilmfest, para nosotros es un honor el poder ser el primer festival de cortometrajes tradicional que proyecta el nuevo cortometraje de Edgard Lledó.

Los realizadores Daniel Ramírez y Ángel Alegría nos han enviado esta nota de prensa donde nos hablan sobre un proyecto de crowfunding donde necesitan vuestro apoyo para poder terminar su cortometraje La primera piedra. A continuación, os dejamos con el texto que nos han redactado los directores de este corto, donde nos cuentan cómo podemos colaborar en su proyecto.                                                              

Un pequeño gesto es una gran ayuda

Sólo quedan 2 semanas para que finalice el plazo para nuestro proyecto en Lánzanos. Llevamos algo más de la mitad del dinero que necesitamos, pero todavía faltan casi 1000 euros para conseguir el objetivo.

Pedimos aportaciones pequeñas de 10 euros para conseguir que, entre todos, podamos terminar el corto y que así pueda ser llevado a festivales y visto en la forma que se merece.

Hemos trabajado mucho hasta ahora y seguimos trabajando... Sería una pena no verlo terminado.

Lánzanos es una plataforma de Crowdfunding, es decir, de financiación colectiva. Es una web donde muchas personas cuelgan sus proyectos con la esperanza de conseguir, entre todos, sacarlos adelante. Es un concepto salido por necesidad en estos tiempos de crisis económica en los que es casi imposible pretender que una empresa o institución te financie.

Nosotros, Daniel Ramírez y Ángel Alegría, hemos dirigido un cortometraje que se titula La Primera Piedra. Es un western que hemos rodado hace unos meses en el desierto de Tabernas, en Almería, gracias a la gran implicación de una productora llamada Luna de Ítaca.

El año pasado, el ICAA nos dio un dinero para hacer el corto. Un logro. Pero esa subvención se nos quedaba pequeña por todos lados, porque un western no es un corto que puedas hacer en un fin de semana en la casa que un amigo te presta, con la ropa de los armarios de los actores y con la camarita que tenemos en casa. Quienes hacen cortos saben bien las enormes diferencias en cuanto a necesidades de producción que implica hacer un corto u otro corto. Y en La Primera Piedra hay caballos, pistolas, carretas, decorados, maquillaje especial, una cámara RedOne, treinta y pico personas que tenían que comer y dormir todas las jornadas del rodaje...

Ahora estamos en un punto complicado -uno más- para el proyecto: está editado, el resultado es fantástico pero no tenemos ya dinero para terminar la postproducción. Hemos calculado que con 2000 euros podríamos apañarnos, sabiendo que hay personas y entidades con ganas de rebajarnos sus tarifas porque el corto así lo merece, para conseguir darle un buen retoque final. Nos falta meterle los efectos visuales, hacerle el etalonaje y grabar la banda sonora. Otras cosas también, pero sobre todo ésas son las más gordas.

Hemos colgado nuestra petición en Lánzanos para conseguir, entre todos, esos 2000 euros que nos faltan. Hay recompensas por las aportaciones, aunque creemos que la mejor recompensa es saber que se está contribuyendo, con una pequeña aportación, a ayudar a que un buen corto salga adelante. Porque éste es un muy buen corto. Y estamos seguros de que cuando tengáis la oportunidad de verlo en pantalla grande en algún festival vais a sentiros un poquito parte de ese corto.

Solo os pedimos 10 euros. Solo 10. Si queréis poner más, ya eso lo dejamos a vuestro entusiasmo. Pero con 10 euros nos estaréis ayudando muchísimo y nosotros, al igual que otros compañeros del proyecto, no nos olvidaremos de ese gesto.

La Primera Piedra en Lánzanos.

La Primera Piedra en Facebook.

Esta joven actriz y escritora ha colaborado en numerosos y premiados cortometrajes, en series de televisión y en reconocidos largometrajes de cine independiente. Actualmente, la podemos ver como actriz y escritora de unos montajes teatrales que se están representando con bastante éxito en La Escalera de Jacob, una conocida sala de teatro alternativa madrileña.

Trabajar con Eva Redondo es un auténtico placer (fui su director en el cortometraje "Pesares"). Tiene tanto talento, ganas de trabajar y las ideas tan claras, que no es de extrañar que en los últimos meses esté tan activa a nivel profesional, tanto como actriz como en su faceta de escritora.

A continuación, os dejo la el resultado de esos tres cuartos de hora que duró nuestra conversación, en los que hablamos de sus proyectos pasados, presentes y futuros.

-La primera pregunta es la que solemos hacerle a todos nuestros entrevistados. ¿En qué momento te planteaste que lo tuyo era la interpretación?

La verdad es que yo creo que es una carrera vocacional. Desde pequeña siempre he tendido un poco a interpretar. Como soy hija única, normalmente me pasaba mucho tiempo sola en casa y me entretenía haciendo pequeñas obritas de teatro. Primero las hacía para mí y, después, cuando se me ocurría una idea divertida, me juntaba con mis primos y las hacíamos para mis padres.

El problema fue que yo terminé el instituto y claro, plantearle a mis padres que me quería venir a Madrid, recién terminado el instituto a estudiar interpretación, me pareció un poquito complicado. Lo comenté y mis padres me dijeron "¿Por qué no estudias primero una carrera con futuro -como dicen ellos, que hoy en día tampoco tiene nada futuro- y cuando la termines, si te apetece, estudias interpretación donde tú quieras?".

Estudié publicidad en Salamanca y cuando la terminé, vamos, me faltó tiempo para venirme a Madrid para estudiar aquí interpretación. Creo que, en realidad, es eso: es una carrera vocacional, como medicina, los profesores...

-Aunque sea una carrera vocacional, ¿te pusiste alguna meta a la que querías llegar?

La meta que me propuse fue vivir de la interpretación. Poder mantenerme económicamente trabajando como actriz. A día de hoy, puedo decir que la he conseguido, a pesar de que luego encontré otras vocaciones como el guión. Digamos que a día de hoy vivo del guión y la interpretación. Meta cumplida, por el momento. Siguiente meta: Seguir viviendo de esto. (Risas).

-¿Es importante formarte como actriz para dar la mejor interpretación que te sea posible?

En mi opinión, es fundamental. Porque la formación en interpretación lo que te aporta es tener una técnica a la que agarrarte. No sé, es como un cirujano. Uno puede tener dotes, puede ser muy bueno trabajando con las manos; pero si no tiene una técnica que le de precisión, no puede hilar tan fino. En el caso de la interpretación es igual: Una técnica te permite hilar más fino.

-¿La interpretación es una carrera en la que siempre tienes que estar renovándote y seguir aprendiendo cosas nuevas?

Creo que sí. Primero, está bien de vez en cuando reciclarse un poco. Has aprendido una técnica y un día dices: "Me apetece probar esta otra", porque al final, cada uno tiene su propia técnica, que suele consistir en un poquito de aquí y un poquito de allá. Y luego, por otra parte, está la vida, que creo que es la mayor fuente de formación. Un actor tiene que estar siempre con los cinco sentidos abiertos. Observar mucho, escuchar mucho, dejarse afectar mucho... la vida te está continuamente estimulando para que sigas creciendo como persona y como actriz.

-Eres actriz de teatro, de televisión, de cine... ¿qué diferencias encuentras entre actuar en uno u otro medio?

El teatro es el medio del actor. El cine es el medio del director. Y la tele es el medio de la velocidad... Creo que donde el actor puede tener más libertad es en el teatro.

El teatro es el medio del actor, porque el proceso de los ensayos te permite ir investigando, ir encontrando cositas que siempre van a enriquecer al final el resultado. El cine es el medio del director porque confluyen otros factores como pueden ser las marcas para la cámara necesarios, los encuadres... por lo tanto, supone que el actor esté más constreñido y no tenga tanta libertad. Lo cual no es mejor ni peor, simplemente es distinto. Y en la televisión, pues es como que lo tienes que tener para "ya". Normalmente no hay tiempo ni siquiera para repasar el texto. Tienes que llevar una propuesta muy clara... porque si no, no vas a tener tiempo casi ni de lo que te digo, de pasar el texto con tu compañero. Tampoco es que sea mejor ni peor, creo que sí que estaría bien pasar el texto un par de veces, pero bueno... también te obliga a estar más activo y a recibir más del otro en el momento, para tú mismo poder agarrarte a algo, porque claro si no, es complicado.

-¿Tienes algún sistema para prepararte los papeles que interpretas y meterte bien en la piel de los personajes?

Cada personaje lo abordo de una manera distinta. Suelo trabajar mucho con los antecedentes, quizá sea por el tema del guión -que me gusta mucho escribir-. Intento casi, casi escribirme toda la biografía de cada personaje que interpreto. Porque de alguna manera, creo que me ayuda a conocerlo más, a acercarme más a él. Casi siempre parto de un pasado para poder estar en ese presente del personaje.

-¿Qué tipo de personajes te gusta más interpretar?

La verdad es que todos los personajes. Sí que es cierto que hay algunos personajes que están más cercanos a mí. Por alguna extraña razón me resulta más sencillo interpretar personajes con cierta autoridad. Lo cual es extraño porque luego en la vida no soy nada autoritaria, todo lo contrario. Ya me gustaría. Ese tipo de personajes me resultan más sencillos. Me gustan todos los personajes, la verdad.

-Ya que has hablado de que te gusta escribir, ¿qué te animó a escribir tus propias historias?

Pues me animaron mis inquietudes, tengo muchas inquietudes y también veo muchas cosas que no me gustan o, al contrario, cosas que me gustan mucho y me gusta reflejarlas. Cuando yo era mas joven escribía pequeños relatos para mí, pero cuando empecé a estudiar guión y estudie también algo de dramaturgia, me di cuenta que ese era el medio. Yo creo que cada uno tiene un medio en el que se siente muy cómodo escribiendo. Unas personas en la poesía, otros en el relato... yo descubrí que era en el formato de guión en el que me sentía cómoda. Me parece importante en ese sentido ser responsable. Yo intento ser responsable con lo que escribo, escribir algo que realmente quiera cambiar o quiera criticar o quiera dejar constancia de que es algo plausible.

-¿Te inspiras en algo para construir tus guiones o libretos?

Me suelo inspirar en la vida. A veces quizá en alguna noticia, muchas veces son pequeñas vivencias del pasado o algún recuerdo difuso del pasado, también suele ser inspirador. Incluso anécdotas que te cuenta otra gente.

-Como actriz, participas en algunos textos que tú misma escribes para cine o teatro, ¿es complicado escribir algo que luego vas a interpretar?

No, al contrario. A mí me resulta mucho mas sencillo, porque he vivido el proceso del personaje desde que nació. Me resulta más complicado actuar en cosas que luego dirijo, eso sí me resulta mas complejo. Porque claro, estar en una obra de teatro desde dentro como actriz, hace que quizá no tenga una visión de mí misma desde fuera como directora. Ahí suelo pedirle ayuda siempre a Daniel Ramírez.

-En teatro formas parte de la obra "Sketchofrénicos. Enfermos de humor", junto a Manuel Burque, ¿cómo nació la idea para montar la obra?

Burque y yo nos conocimos en la universidad. Él estudiaba comunicación y yo publicidad y ahí teníamos un grupillo de teatro. Después, nos vinimos los dos juntos a Madrid, y estudiamos en la misma escuela de interpretación y de repente un día nos dimos cuenta que teníamos un sentido del humor muy parecido. Nos hacían gracia las mismas cosas y podíamos estar horas haciendo nuestros propios chistes. Entonces, una vez nos fuimos de cuentacuentos por España y en el autocar nos empezábamos a imaginar situaciones. "¿Te imaginas que tal ja ja, ja ja?" y nos hacía mucha gracia. Nos decidimos a escribirlas y un buen día dijimos "¿oye por qué no las hacemos y empezamos a improvisar cómo sería hacerlas en escena?" Ahí empezó. Luego grabamos un capítulo piloto que estará por ahí, que se llamaba "El informe pimpollo". Ahí eramos tres y esa es la base de "Scketchofrénicos".

-¿En qué os fijáis de nuestra actualidad o nuestra sociedad para elaborar los sckecths?

Pues mira, intentamos pequeñas criticas sociales. Por ejemplo, criticamos el racismo o la intolerancia; criticamos el abuso de poder; criticamos el consumismo... Utilizamos el humor para hablar de aquello que no nos gusta y creo que por eso la gente se incomoda tanto.

-Ya que hablamos de gente que se incomoda, ¿os ponéis algún límite a la hora de contar cosas que no son precisamente de humor políticamente correcto?

No. Hemos hablado mucho de este tema, porque es verdad que hay gente que alguna vez ha venido a vernos y se ha sentido ofendida. Entonces, nosotros pensamos en cambiar algunas cosas del espectáculo, pero pensamos al final que no, porque el humor no tiene que tener límites. Nosotros utilizamos el humor para poner en evidencia que esas situaciones que están ahí reflejadas no están bien. Cuanto más libre sea el humor y más incomodes público, más tiempo le da a reflexionar sobre lo que esta viendo. Si le dejas en un estado de mera risa y mero divertimento no va a reflexionar. Sin embargo, si consigues darle un poco mas hondo y golpearle un poquito, quizá esa pequeña ofensa haga que se pare a reflexionar sobre lo que esta viendo.

-¿Cómo hacéis para combinar humor y crítica social?

Lo que hacemos primero es pensar qué es lo que queremos criticar. Después, pensamos cómo llevar eso al extremo y, después, nos ponemos a improvisar sobre esa situación.

-¿Es complicado escribir humor?

Es más complicado escribir humor que escribir drama, sí yo creo que sí.

-¿Qué soléis hacer para saber si los sketchs y situaciones que escribís van a gustarle al público?

Tenemos una ley: si nos hacen gracia a nosotros dos, las vamos a hacer, independientemente de que les vayan a gustar al público o no. Es decir, nos arriesgamos mucho en ese sentido y, a la contra, si a unos de los dos no les hace gracia, entonces no lo hacemos. Casualmente, pues las cosas que nos hacen gracia, hemos descubierto que a la gente les hacen gracia. Es cierto que no a todo el mundo.

Creo que el espectáculo de "Scketchofrénicos" tiene un público muy concreto, que uno percibe cuando estan en la sala. Es un humor muy gamberro y tiene que ser gente muy gamberra. Fijate, no tiene tanto que ver con la edad, como yo pensaba en un principio, que pensaba que era para gente de veinte o treinta. Viene gente de cincuenta que le encanta, todo tiene que ver con una cuestión de gente que sea muy abierta, que no sea remilgada, que sea capaz de ver mas allá del skecth, de leer entre lineas...

-Como contáis tantas situaciones disparatadas, ¿como os podéis contener un ataque de risa si os da?

Pues alguna vez directamente nos da. Sobre todo a mí me cuesta controlarlo, así que lo que hago es integrarlo. Me río, suelto el impulso de reír, y ese personaje en concreto que esta haciendo ese skecht, se ríe.

-¿Improvisáis algunos diálogos o situaciones?

Casi todos.

-¿Renovais los skechts que se pueden ver casa semana en vuestra obra?

Sí, cada cierto tiempo intentamos hacer una revisión del espectáculo. Quitamos sketches que quizá a nosotros mismos nos empiezan a aburrir, metemos otros que teníamos en el cajón, escribimos alguno nuevo para probarlo y vamos reciclando, porque eso también a nosotros nos motiva mas.

-¿Le queda cuerda para rato a Sketchofrénicos?

Yo creo que sí. De hecho, ahora mismo está muy posicionado. Estamos en la Latina, en la Escalera de Jacob de la Latina, los sábados a las 20:15h. Creo que hemos conseguido que en esa franja horaria funcione muy bien el espectáculo y hemos conseguido que empiece a venir justo el público que es el idóneo para nuestro espectáculo.

-Hace un tiempo organizasteis una iniciativa por Twitter y fue mucha gente a ver la obra, ¿como fue eso?

Mi compañero, está muy metido en Twitter -yo me he metido, pero me cuesta un poco mas la verdad, me da un poco de pereza, no tengo la constancia suficiente y no tengo Iphone- y se le ocurrió a él la idea de invitar a tuiteros que tienen muchos seguidores y mucho sentido del humor, quizá muy parecido al nuestro, invitarles a ver Sketchofrénicos. Ese día fue espectacular, porque vinieron cincuenta y cinco tuiteros con un sentido de humor muy parecido al nuestro y les encantó, les gusto muchísimo el espectáculo. Gente, por cierto, encantadora, que yo no conocía. Sólo conocía su avatar y su sentido del humor. La verdad es que fue gente muy maja. Han vuelto muchos, han repetido.

-Eso te iba a preguntar, ¿repite la gente?

Has repetido, sí. Además, nos han recomendado, porque ha venido mucha gente nueva y nos han dicho: "me lo recomendó tal o cual".

-Actualmente también estas con la obra Esquizofrenia, donde colaboras como actriz y guionista, ¿de donde te surgió la necesitad de contar una historia sobre personas que viven con esta enfermedad?

Entré a formar parte de un grupo de teatro en su día, donde se iba a escribir una obra sobre la esquizofrenia. Por circunstancias de la vida, al final terminé escribiéndola yo. En un principio era un tema que no me había dado a mi por indagar, pero de repente cuando empecé a investigar sobre la enfermedad y a conocer esquizofrenicos, a conocer a cuidadores y tal, empecé a sentir que era una necesidad, porque realmente empecé a sentir que tienen un trato muy injusto para el resto de la sociedad. Hay muy mala prensa sobre la esquizofrenia, que son personas que no se sienten comprendidas, que tienen muchas emociones que les cuesta manejar: como miedos, soledad, angustia... Y yo pensé que había que hablar de eso y que era necesario que la gente conociera la enfermedad pues para, simplemente, saber que es una enfermedad más. Es como el que tiene un cáncer y ya está, no es otra cosa y por hay empezó.

-¿Cuánto duró ese proceso de documentación?

Pues un año.

-¿Cómo intentaste integrar en el libreto todo lo que fuiste viendo?

Pues me quedé con aquellas cosas que más me llamaron la atención. En el caso de la enfermedad en sí, me quedé con las emociones que tenían los esquizofrénicos: el miedo, la soledad, la angustia...

Me llamaba también la atención cómo a la propia familia le cuesta asumir la enfermedad. De hecho, normalmente, entran en una primera fase de negación, donde la propia familia la niega. Y eso me llamaba la atención: cómo podían negar lo evidente. Y es simplemente por miedo a asumir que un hijo, un hermano o un padre tienen la enfermedad, eso también lo añadí al libreto.

Después, quería tratar el tema de la sociedad: cómo la sociedad los ve. Lo hice incluyendo el personaje de dos abogados que están en la obra. Y, también, quería hablar de la psiquiatría en este tema: cómo la aborda. Yo he visto a algunos psiquiatras, algunos terapeutas ocupacionales que verdaderamente adoran su trabajo y cada día se renuevan, inventan terapias o actividades para hacer. Luego hay otra rama, un poco mas de funcionariado, por así decirlo, que lo único que hacen es medicar. Realmente, la medicación es necesaria, pero yo pienso que tiene que ir acompañada de algo más.

-¿Te resultó duro escribir alguna parte del libreto?

Me resultó duro escribir todo, sí. Porque meterse en ese terreno que tiene que ver tanto con el mundo de las emociones y con el mundo del miedo pues es doloroso. Sí, me resultó duro.

-¿Qué historia se va a encontrar el espectador que se anime a ver Esquizofrenia?

Se va a encontrar con una historia muy diferente. Con una historia que, a priori, podría parecer muy caótica pero que, sin embargo, tiene un hilo conductor muy claro. Se va a encontrar un montaje muy vertiginoso con una sobre estimulación y se va a encontrar con sus propias emociones, yo creo.

-En esta obra también interpretas a uno de los personajes. Con algo tan intenso como lo que cuentas y lo que haces, ¿se te queda algo cuando baja el telón?

Sí, se me quedan muchas cosas. Mira, ahora mismo estoy interpretando varios personajes. Hay uno, el de la esquizofrenia, que es un personaje más de la obra. Es curioso porque la esquizofrenia como enfermedad la verdad es que no sabía bien de dónde agarrarme, así que finalmente lo que decidí fue llevarlo a la tierra, llevarlo a mí y fijarme pequeños objetivos con cada enfermo, cuando en realidad lo que ella quiere es que ellos se queden con ella, que estén con ella. Ella tiene el mismo miedo que los enfermos y es: "no te vayas, quédate conmigo. Yo también tengo miedo, no te alejes de mí". Y bueno, es curioso.

-¿Cómo notas que reacciona el público al ver la obra?

Pues mira, es muy sorprendente para bien, porque normalmente creo que es un problema que tenemos en general. Pensamos que el drama no vende, que el drama es aburrido, los propios distribuidores tienen esa opinión, las salas de teatro, también... Y, sin embargo, yo creo que el público agradece mucho el drama, ¿por qué no? El público cuando va al teatro quiere vivir emociones. La diversión es una, pero la angustia es otra. El espectador de Esquizofrenia reacciona, es muchísimo mas agradecido que quizá el de cualquier obra de comedia en la que haya estado yo.

En la sección de criticas de Atrápalo, sorprendentemente tenemos muy buena nota y yo creo que es porque el espectador, o por lo que me han dicho a mí, se identifica desde el primer minuto con los personajes, entran en esa obra y la viven casi como propia, lo cual es curioso.

-¿Dónde podemos ver la obra?

Con Esquizofrenia estamos los domingos a las 21:15h en La Escalera de Jacob de Lavapiés.

-Cambiando de medio, también has participado en varios cortometrajes, ¿qué tiene este formato para que digas "voy a participar en el rodaje de un corto"?

A mí me parece que es un formato genial porque te permite contar una historia en un tiempo que va desde el minuto hasta los veinticinco minutos. Entonces claro, eso suele hacer que los personajes, una de dos, empiecen en una situación muy crítica o tengan unas circunstancias muy extremas... se acelera todo mucho, quiero decir. Eso hace que para un actor sea muy interesante encarnar un personaje de cortometraje. La variedad de personajes que hay en cortometrajes es infinita y yo he encarnado personajes en cortos que sé que jamás voy a volver a hacer ni en teatro ni en cine, porque son directamente disparatados, porque son demasiado extraños y para un corto funcionan, pero para un largo, pues quizá no.

-Como guionista de cortometraje, ¿que tipo de historias te gusta contar? ¿cómo piensas que debe ser una historia para un corto?

A mí me gustan cada vez mas las historias sencillas. A mí me gusta contar una historia sencilla, porque creo que la vida en el fondo es eso, estamos cada día viviendo historias sencillas y que, sin embargo, nos afectan mucho. Últimamente me apetece contar eso.

-Uno de los últimos cortos en el que has participado es "Pesares", ¿cómo te metiste en un personaje que tiene que seguir adelante con su vida pese a todo lo que lleva detrás?

Ese personaje en concreto me gusta mucho por eso, porque es un personaje al que le pasaron cosas y decidió que quizá había una vía de escape, que era quizá la vía mas rápida pero que, sin embargo, asumió que la vida sigue. Yo creo que estaba empezando a valorar las pequeñas cosas que tiene la vida, que creo que es lo que aprende, aprende que pelando habas y hablando con su compañero de piso también puede ser feliz. Yo creo que ese personaje me lo lleve un poco a mí, es decir cuando uno descubre que hay pequeñas cosas de la vida que está pasando por alto por esta vorágine de velocidad en la que vivimos y, de repente, siente que tiene que aprender a valorar los pequeños detalles de la vida.

-¿Por qué crees que los personajes y la historia de Pesares parecen conectar tan bien con cierta parte del público?

Creo que es precisamente por eso, porque no son grandes personajes. Quiero decir, son grandes personajes pero no son héroes y tampoco son especialmente victimas. Son personas muy comunes en los que el espectador se puede ver reflejado con mucha facilidad, porque están ahí. Es como un día normal en la vida de cualquiera de nosotros y cómo esas dos personas se encuentran con un mini conflicto y cómo lo resuelven, que es simplemente diciendo: "bueno, sí que pena, pero qué le vamos a hacer. Seguimos adelante".

-¿Qué recuerdas con mas cariño del rodaje del corto Pesares?

Yo recuerdo la comida (risas) y el momento de pelar habas, que me gustó mucho, porque casualmente ni Jesús ni yo, habíamos pelado habas nunca y el hecho de que nos enseñarais a pelar habas, incluso me pareciera una actividad muy relajante, en ese momento me gustó mucho. En general, el buen ambiente que hubo, la dinámica de trabajo fluida, con mucho cariño...

-Otro corto en el que te podemos ver recientemente es "La bolsa o la vida" de Marilu Marciel y Juan Carrascal-Ynigo. ¿Cómo intentaste compaginar el humor con el drama que estás mostrando, para que el mensaje del corto le llegara a la gente?

Yo creo que los contrastes funcionan muy bien en el humor. Por ejemplo, si estás contando una situación dramática y ves que el que la cuenta está frivolizando, en el espectador provocas un efecto de contradicción tan grande que de repente va a empezar a... En el caso de este corto en concreto, lógicamente el espectador está juzgando a la presentadora y eso es lo que tiene que hacer, juzgar a la presentadora, que son aquellas compañías que están traficando literalmente con la comida.

-¿Recibiste documentación sobre todo el tema que trata el corto antes de dar vida a la presentadora?

Pues mira, no. Como últimamente me había dado a mí por ver mucho documental, del tipo Inside Job... Había visto el de Food. Inc y había quedado espantadisima, me pareció espeluznante, me dio mas miedo que El Exorcista ese documental porque ver cómo se esta especulando con la comida, que es un bien de primera necesidad, me parece ya el colmo de la inhumanidad. Había visto hacía poco ese documental, me llegó este guión y dije "es maravilloso, qué bien". Además, lo pensé así, es necesario. Hay que hablar de esto, no nos puede pasar lo que está pasando en Estados Unidos.

-¿Crees que los medios generalistas nos dan suficiente información sobre lo que pasa con el tema que denuncia este corto?

No, de hecho creo que no nos dan ninguna información. Abren todos los días los telediarios con economía sobre si tal agencia nos baja la nota, si estamos entrando en recesión, si tal noséqué... Es decir, bueno ya está sí lo sabemos pero, ¿por qué esta necesidad de meter más miedo? ¿Es que el miedo viene bien? Por que yo creo que sí. El miedo viene muy bien, porque mucha gente me comenta: "no, en mi trabajo estoy muy explotado, pero claro tal y como esta la cosa..." Y es no. Vale, estamos en una situación crítica, pero intentan que el miedo nos esté paralizando.

Creo que es necesario, deberían verse en todos los institutos este tipo de documentales, en los que se habla de la privatización de la sanidad, los que hablan de la especulación con la comida, los que hablan de la especulación con el gas, dentro de poco va a ser con el agua... para que no nos coja desprevenidos, para que digamos "esto aquí, por favor; no puede pasar". Yo hablo del género documental, pero otra gente puede decir "es necesario leer este libro". Perfecto, pero hay que saber lo que pasa, porque si no, nos va a pillar por sorpresa y no vamos a poder pararlo.

-Actualmente se encuentra en post producción "La primera piedra" de Daniel Ramirez y Angel Alegría, ¿qué nos puedes contar sobre este corto?

Es un corto de genero western que va a ser bastante impactante, me parece. Es un western muy peculiar, es un western porque está rodado en un poblado western, porque hay caballos y porque hay alguna pistola, pero lo que sucede es una situación paralela a situaciones que están ocurriendo ahora en la actualidad, y eso está muy bien.

-En "La primera piedra" colaboraste en la escritura de guión junto a Daniel Ramirez y Angel Alegría, ¿cómo es el proceso de escribir un guión entre tres personas distintas?

Es complicado, pero también es enriquecedor. Es complicado porque lógicamente para ponerse de acuerdo tres personas, es un debate constante. También es enriquecedor porque justamente hay seis ojos revisando un guión. Por lo tanto, uno puede hacer una sugerencia maravillosa, el otro además la puede mejorar y el otro extra mejorarla.

Lo importante de ese cortometraje es que trata el tema de cómo en todas las sociedades siempre se busca un chivo espiratorio al que hacemos responsable de los problemas de los demás. En la época que estamos viviendo desgraciadamente me temo que podemos buscar chivos expiatorios y me da a mí que los inmigrantes van a ser uno de ellos. Creo que este corto esta hablando un poco de eso.

-¿Intentasteis ser fieles al relato original en el que se basa "La primera Piedra"?

"Mientras agonizo", que es el relato en el que esta inspirado el cortometraje fue simplemente eso, una inspiración, sobre todo más que de guión de ambiente. Es decir, como cuando uno está leyendo ese libro, puede llegar a oler la atmósfera que describe creo que en el cortometraje se ha intentado también eso, que uno al verlo pueda oler el sudor, oler la madera, oler casi la sangre...

-¿Cuál es el personaje que interpretas en "La primera piedra"?

Pues yo ahí interpreto el personaje de Sara, que es una prostituta repudiada por el pueblo, de hecho se le tiene prohibida la entrada al pueblo y es una mujer muy vulnerable.

-"La primera piedra" se rodó en decorados del oeste de Almería, ¿qué sentiste al estar trabajando en un lugar que forma parte de la historia del cine?

Jo, es una maravilla. Estar en un decorado real a mi me parecio una maravilla, porque claro, es que directamente vas caminando por allí y es que tu fuente de inspiración esta hay mismo, la puedes ver, la puedes tocar, la puedes oler. Es maravilloso.

-¿Fue complicado rodar en exteriores?

Sí, porque el primer día de hecho nos cayó una tormenta. Fíjate, Almería es un desierto, llueve tres veces al año como mucho, pues a nosotros nos llovió, pero además parecía el diluvio universal. Parecía que se iba a acabar el mundo al día siguiente, y como claro estábamos en barro, el barro nos llegaba hasta la rodilla. Yo recuerdo de ver a todo el equipo técnico y artístico tiritando, yo tenía ganas de llorar ese día, porque claro el frío estaba metido en los huesos. También tengo ganas de verlo porque eso, supongo, afectó a la interpretación de todos ese día. Me gustaría ver el resultado de si se aprecia, no se aprecia o en que manera se aprecia.

Luego ya el resto de días hizo un sol de justicia, lo cual para mí que soy friolera fue mucho mejor. No fue complicado rodar en exteriores en cuanto a luz se refiere, pero sí en cuanto a climatología, por ser tan extrema.

-¿Cómo llevaste las largas sesiones de maquillaje y caracterización que tenías que tener en ese corto?

Pues muy bien, porque teníamos a dos maquilladores que realmente lo hacían increíblemente rápido y mira que era una caracterización la que teníamos todos bastante compleja. Pero ellos, la verdad es que lo hacían muy rápido. Aparte eran encantadores, como siempre los maquilladores suelen ser encantadores. Era una maravilla.

-¿Cuándo crees que podremos ver "La primera piedra"?

Pues no tengo ni idea, porque ahora están en proceso de montaje y luego sé que tiene que pasar por postproducción. Espero que de aquí a cuatro meses. Me gustaría mucho.

-Para terminar, ¿podrías contarnos futuros proyectos en los que vayas a participar?

Pues mira, ahora mismo hemos creado un grupo creativo de trabajo Daniel Ramírez, Marcos Vilariño y yo en el que nos hemos propuesto generar obras, piezas audiovisuales cada mes y cosas que nos motiven y supongan un proceso de investigación, que nos interese por algo. Bueno ese proyecto que creo que esta bien, tener una constancia creativa.

Después, Estoy empezando a dirigir una obra de teatro con dos mujeres, dos señoras, trabajo bastante interesante. Estoy creando también con la compañía de "Esquizofrenia". Vamos a intentar también, igual que te digo en el otro marco creativo audiovisual, crear también en el marco teatral.

Y proyectos así concretos, voy a escribir un par de cortometrajes para presentar a subvención y quiero rodar un cortometraje, pero basado en la improvisación. Me apetece también investigar bastante ese campo.

Luego tengo que decir también que estoy en un curso con Sanchis y Misterra que es una estimulación, una fuente de inspiración un proceso creativo, un trabajo de laboratorio experimental, donde verdaderamente creo que todo el grupo nos estamos sintiendo muy vivos. Está siendo un entrenamiento de verdad brutal, porque nos esta estimulando a todos y él es maravilloso como persona y como artista, vamos.

-Pues eso es todo, gracias por tu amabilidad.

De nada Jose.

José Luis Mora.

Videobook Eva Redondo

VIDEOBOOK EVA REDONDO from Eva Redondo on Vimeo.

Este 10 de abril, a las 20:00h, tenemos preparada en Cortos con Ñ la ceremonia de entrega del III Premio Cortometrajista Ejemplar de Cortos con Ñ. Este premio lo concede cada año la Asociación Cultural Cortos con Ñ (organizadores de este festival de cortometrajes) a aquella persona o entidad que consideremos ha contribuido más a difundir el mundo del cortometraje, ya sea por medio de su labor divulgadora, produciendo o dirigiendo cortometrajes.

Este año hemos decidido que el III Premio Cortometrajista Ejemplar vaya a manos de la joven realizadora Manuela Moreno. Licenciada en Arte Dramático por la Escuela Superior de Arte Dramático de Murcia (ESAD) completa sus estudios en la Escuela de Cinematografía y Audiovisuales de la Comunidad de Madrid (ECAM) y en el Instituto Cinematográfico de Madrid (N.I.C), Manuela Moreno es una guionista y directora dotada de un enorme talento que ha aplicado muy bien en cada uno de sus trabajos.

Con su mirada siempre puesta en cómo nos relacionamos los hombres con las mujeres, la joven directora murciana nos ha regalado unas cuantas píldoras sobre cómo nos comportamos ambos sexos en cuestiones como el amor, pero también en otras como la amistad. Manuela tiene un don especial para recrear situaciones cotidianas y ello le viene muy bien para potenciar lo que siempre nos quiere relatar. Sus personajes son siempre personas normales y corrientes que viven una vida normal y corriente, como la mayoría de nosotros. No hay nada impostado en ninguno de ellos y cualquier espectador se identifica enseguida con ellos y con los problemas, dudas o esperanzas que cada uno de ellos guarda dentro de sí.

Los diálogos que les escribe son muy dinámicos y cada frase dice mucho sobre cómo es el personaje que la está pronunciando. Estos diálogos pisan mucho nuestro entorno y resultan todo un derroche de naturalidad, cercanía y un notable ingenio, al estar cargados de ironía, dobles sentidos y mala uva concentrada.

Sus historias parten siempre de una base sencilla. ¿Qué sucede entre dos desconocidos que esperan en una solitaria parada de autobús? ¿Cómo sería ese momento en el que te decides a decirle algo a esa persona con la que deseas pasar el resto de tu vida? ¿Y si te reencontraras en una cafetería con una chica con la que creíste que podías haber tenido algo? ¿Qué ocurre entre unas parejas que comparten una misma cama? Y con ello, Manuela Moreno nos teje relatos que, como la vida misma, tienen tanto de comedia como de drama, pues detrás del acertado humor que destilan siempre sus guiones nos deja entrever un poso más amargo.

Hay cosas cosas que siempre quisimos decir o hacer, pero que nunca nos atrevimos con ello. Otras veces pensamos en aquello que no está bien en nuestra vida y que no sabemos o no podemos cambiar. Todas estas cuestiones las refleja con una enorme maestría en cada uno de sus cortometrajes y en menos de diez minutos nos cuenta -y muy bien- temas universales que tratan sobre cómo es nuestra vida.

Manuela Moreno es, también, una gran directora de actores y es capaz de sacar lo mejor de las dotes interpretativas de las personas con las que trabaja para que sus actuaciones sean lo más realistas que les sea posible. Y ahí, cabe destacar lo unida que está a Manuela Burló, su musa. Actriz y directora se compenetran muy bien y, gracias a eso, la Burló ha participado en todos los cortometrajes dirigidos por la Moreno.

"Camas", "Dolores", "Cloe", "Quiero estar el resto de mi vida contigo"... son cortometrajes redondos en todos sus niveles. Con unos pequeños / grandes guiones, gozan de una gran calidad técnica e interpretativa que les han llevado a ganar merecidamente prestigiosos premios en festivales de cortometrajes de todo el mundo y, además, ser emitidos por Canal+. En este monográfico que hemos preparado sobre Manuela Moreno en Cortos con Ñ proyectaremos todos los cortometrajes que ha realizado, junto con el videoclip "Telescopio", del grupo Alis, del cual Manuela Moreno fue la responsable de escribirlo y dirigirlo.

La ceremonia de entrega del III Premio cortometrajista Ejemplar contará con la presencia como presentadores invitados de Alba Messa, Víctor Alcázar y Encarna Gómez, los protagonizas de "Ficcionad@s". Esta obra se estrenará el próximo 11 de abril en La Escalera de Jacob de La Latina (C/ Mancebos, 4 - Madrid) y, dando vida a los personajes que interpretan en "Ficcionad@s", representarán una pequeña pieza teatral al inicio de esta sesión de Cortos con Ñ.

Todos los cortos que se proyectan en Cortos con Ñ compiten por el Premio del Público de nuestro festival, que está patrocinado por Promofest, distribuidora que otorgará 50 bonos de distribución al corto ganador del premio.

-"Camas", de Manuela Moreno.

Con Raúl Arévalo, Manuela Burló, Benito Sagredo, Belén Cuesta, Rafael Ordorika, Raquel Guerrero, Luis Escudero y Teresa Soria Ruano.

Género: Comedia.

A veces todo puede cambiar tanto en tan poco...

Manuela Moreno, una de las jóvenes realizadoras con mayor talento que hay en la actualidad, firma con su tercer cortometraje la que, por el momento, es una de sus obras más ambiciosas y maduras. Rodeada por un reparto muy coral, formado por un grupo de actores -también- muy jóvenes y con muchísimo talento, Moreno nos escribe cuatro historias sobre relaciones de parejas que tienen como nexo de unión una cama.

El guión sorprende por la profundidad con la que están construidos los personajes, por el realismo de sus dinámicos diálogos y por el acertado tono agridulce que le imprimió Moreno a todo su conjunto.

Por su parte, el trabajo del grupo de actores que trabajó en este corto es más que sobresaliente y todos ellos pusieron su granito de arena para darle tal toque de cercanía a sus interpretaciones, que redondean todavía más un cortometraje tan magnífico que estamos seguros de que llegará lejos en su andadura por festivales y ganará más de un premio.

-"Dolores", de Manuela Moreno.

Con Manuela Burló, Rafa Ordorika y Belén Boluda.

Género: Drama.

Una marquesina de una solitaria parada de autobús. Ese es el lugar donde se cruzarán casualmente dos personas y las soledades que llevan consigo. Pese a venir de mundos distintos, comparten los mismo sueños y esperanzas...

Manuela Moreno, una de las realizadoras de cortometrajes con más talento de la actualidad, firma con "Dolores" un trabajo en donde despliega todo un arsenal de recursos de creación de personajes para construir a dos personajes cuya personalidad desprende realidad y empatía hacia los espectadores. El cortometraje desprende durante todo el metraje un acertado sabor agridulce y sus intérpretes realizan un impresionante trabajo con el que se redondea aun más un cortometraje que ha recibido el beneplácito de la crítica y el público por donde se ha proyectado.

-"Quiero estar el resto de mi vida contigo", de Manuela Moreno.

Con Manuela Burló y Abel López.

Género: Comedia.

Ella espera frente al volante de su coche a que el semáforo se ponga en verde para seguir su camino... cuando para junto a ella un chico del que se enamora perdidamente y con el que sueña pasar el resto de su vida juntos.

Los responsables de este corto nos demuestran para narrar una buena historia que narre con ingenio una situación no hacen falta grandes artificios o una duración exagerada; pues con el ingenio y el talento es más que suficiente.

-"Cloe", de Manuela Moreno.

Con Manuela Burló y Toni Bernetti.

¿Crees en el amor a primera vista?

Después de "Camas", Manuela Moreno nos trae este cortometraje en el que vemos muestras de todo el talento e ingenio que tiene para tratar las relaciones -casi siempre amorosas- entre hombres y mujeres. En esta ocasión vuelve a regalarnos un guión en el cual su afilada pluma vuelve a escribir una ácida y agridulce historia que transcurre en una conocida cafetería. Sus diálogos son tan brillantes como siempre, al igual que el tratamiento de personajes y se vale únicamente de tres minutos y medio para condensar una historia con cierto trasfondo.

Por otro lado, Toni Bernetti y Manuela Burló (musa por excelencia de la Moreno) consiguen crear la química necesaria que necesitan sus dos personajes, realizando ambos unas muy buenas actuaciones, de esas que consiguen que el espectador se crea lo que hacen.

-"Qué fuerte, tía", de Manuela Moreno.

Con Manuela Burló y Elisa Lledó.

La convivencia nunca fue fácil...

Manuela Moreno es una de las más prometedoras realizadoras de cortometrajes que existen en la actualidad. Y en esta pequeña pieza vuelve a demostrarnos todo su ingenio y talento, contándonos una pequeña historia cotidiana sobre dos personajes que son como la mayoría de nosotros. Los diálogos brillan por su naturalidad y el guión, pese a la corta duración del corto, contiene más de un giro que sorprenderá a más de uno.

Por otro lado, hay que decir que Manuela Burló, la musa por excelencia de Manuela Moreno, borda un trabajo en el que realiza un auténtico recital de interpretación y me quedo con el desparpajo con el que se desenvuelve interpretando al personaje creado por "la Moreno". Y hay que alabar también la labor realizada por la actriz Elisa Lledó, quien secunda a la perfección a Manuela burló.

En fin, que disfrutéis con este pequeño corto que demuestra una cosa: Con talento, no importa tener pocos medios; pues se conseguirá rodar un buen cortometraje. Y "Qué fuerte, tía" es un buen cortometraje.

-"Telescopio", de Manuela Moreno.

Con Dani Pérez Prada.

El videoclip de "Telescopio", el single del álbum "Material de diserción" del grupo Alis fue preparado por Manuela Moreno del mismo modo en el que esta joven realizadora ha producido todos sus cortometrajes.

Con una historia completamente integrada dentro de la canción que ha compuesto este conocido grupo de música independiente, Manuela Moreno elabora un breve y tierno relato sobre un atribulado dependiente de un videoclub, magníficamente interpretado por Dani Pérez Prada, que recibe frecuentemente la visita de una cliente de quien está enamorado.

Jose Luis Mora.