El otro día me compré un pijama nuevo. Sí, esto no es un blog personal, así que normalmente este tipo de tonterías no tienen cabida aquí. Pero es que ese pijama, comprado en una gran superficie (nada de previews ni de tiendas frikis), tenía la imagen que reproduzco ilustrando este post. Con rotulación, títulos de crédito y todo. Eso sí, recoloreada de forma más simple
Los cómics y sus iconos se están implantando más que nunca en la cultura popular. Y las versiones definitivas son las primigenias. Para ese pijama no se ha elegido la imagen del Capitán América rediseñado por Alex Ross. Ni una ilustración de Steve Epting, que marca el tono en la serie actual del Capi, ni de sus continuadores Luke Ross o Jackson Guice. Tampoco se han elegido las dinámicas imágenes noventeras de Andy Kubert o Ron Garney, ni la imagen contundente que inmortalizó el maestro ROB!. Ni los ochenteros Kieron Dwyer, Mike Zeck, o Paul Neary. Ni el sólido Sal Buscema ni el cinematográfico Steranko
No, el diseñador textil se ha ido al origen. A una ilustración de Jack Kirby. Es una ilustración como otra cualquiera de las que hizo con ya casi cincuenta años, en una época en que dibujaba tanto que seguramente la hizo en una o dos horas porque el mismo día tenía que dibujar otras cuatro páginas para mantener su ritmo de producción. Y aún así es suficientemente atractiva como para que a la gente le llame la atención y pague por ella. Porque sigue manteniendo su fuerza y su impacto cuarenta y cinco años después
Esa es una de las razones por las que Kirby sigue siendo el Rey. Hay más, claro, pero hoy solo quería hablar de esa viñeta
Los cómics y sus iconos se están implantando más que nunca en la cultura popular. Y las versiones definitivas son las primigenias. Para ese pijama no se ha elegido la imagen del Capitán América rediseñado por Alex Ross. Ni una ilustración de Steve Epting, que marca el tono en la serie actual del Capi, ni de sus continuadores Luke Ross o Jackson Guice. Tampoco se han elegido las dinámicas imágenes noventeras de Andy Kubert o Ron Garney, ni la imagen contundente que inmortalizó el maestro ROB!. Ni los ochenteros Kieron Dwyer, Mike Zeck, o Paul Neary. Ni el sólido Sal Buscema ni el cinematográfico Steranko
No, el diseñador textil se ha ido al origen. A una ilustración de Jack Kirby. Es una ilustración como otra cualquiera de las que hizo con ya casi cincuenta años, en una época en que dibujaba tanto que seguramente la hizo en una o dos horas porque el mismo día tenía que dibujar otras cuatro páginas para mantener su ritmo de producción. Y aún así es suficientemente atractiva como para que a la gente le llame la atención y pague por ella. Porque sigue manteniendo su fuerza y su impacto cuarenta y cinco años después
Esa es una de las razones por las que Kirby sigue siendo el Rey. Hay más, claro, pero hoy solo quería hablar de esa viñeta
¿Dónde puedo comprar ese pijama?
¡En algún Alcampo!