Crítica: "Sondela", de Rodolfo Martínez

Rodolfo nos propone como punto de partida la investigación que realiza el detective Campos sobre el asesinato de un fauno en la zona de influencia "terrana", esa parte de la Tierra donde la magia de la Atlántida no funciona y sí lo hace la tecnología. De este modo, el autor asturiano comienza esta novela como si fuera aparentemente una novela negra al uso, con una narración en primera persona y con la sensación de que el marco de historia fantástica sería simplemente un elemento decorativo dentro de toda la trama. Pero esto no es así, pues Rodolfo Martínez es tan buen escritor que usa este inicio para captar la atención de todo tipo de lectores y, con ello, llevarlo donde él quiere.

Y donde nos pretende llevar es a narrarnos una historia donde podemos apreciar su particular sello de identidad como escritor. Entre otros recursos reconocibles de este autor se encuentra uno que me llama poderosamente la atención y se trata de que una narración en primera persona cambia a una narración en tercera, para entender otro punto de vista sobre una historia o personaje. Así, por ejemplo, el tono de la historia cambia según nos esté relatando la investigación que lleva a cabo Campos o esa parte que está más emparentada con un relato de la Grecia Clásica que con una historia contemporánea. En este sentido, ahí tenemos también ese gusto por los mitos que tiene Martínez, quien nos hace una descripción muy detallada de lo que podría haber sido ese mítico continente perdido. Esta parte está muy bien creada, tanto en lo social como en la ambientación y este escritor hace un buen trabajo para encajar todo aquello dentro de la historia, sin entorpecer la acción ni aburrir al lector con una saturación de datos innecesarios.

Los personajes son, como nos tiene acostumbrados, todo un prodigio de la construcción y Rodolfo Martínez les dota de unos diálogos notablemente pulidos que dicen mucho de cada personaje que los pronuncia, dotando a cada ser que pasa por las páginas de esta novela de una voz propia. Además, les ha dotado de un gran trasfondo a cada uno de ellos y muchos de ellos son realmente carismáticos. Por otro lado, gracias a esos personajes podemos conocer cuales son las diferencias entre dos sociedades tan distintas como lo son la terrana y la atlante, haciendo el autor un acertado análisis sobre lo que supone el choque entre dos culturas completamente diferentes.

Sondela es una novela muy bien engranada y Rodolfo Martínez logra que no nos aburramos en ningún momento. No hay ni un solo punto muerto a lo largo de toda la narración y todo lo que nos cuenta Martínez en cada página es importante para el desarrollo de la historia. Con todo esto, lo que nos queda es una gran novela de un gran autor, altamente recomendable para cualquier lector que desee leer una obra que resulte entretenida, esté muy bien escrita y aporte algo más que una mera lectura. Pues Sondela es de esos títulos que dejan su poso en el lector.